La arcilla blanca, también llamada caolín, es un importante activo purificante capaz de desincrustar los residuos, células muertas y sebo acumulado de los poros obstruidos.
Este producto es uno de los ingredientes naturales para conseguir una piel sana y radiante; ya que aporta suavidad al cutis gracias a su alto contenido en sílice y a sus propiedades tensoras, absorbentes y remineralizantes.
Además ayuda a limpiar en profundidad y alisar la superficie cutánea para que se muestre luminosa.
Arcilla blanca
Es un excelente desintoxicante para la piel, posee propiedades antibacterianas y curativas por lo que es recomendada para pieles con problemas de acné.
También elimina las impurezas de la piel, a la vez que hidrata el cutis y ayuda a regenerar las células.
Aunque se puede utilizar para el cabello e incluso los dientes, es en la dermis donde actúa de una manera más visible, apta para todo tipo de pieles, entre ellas las más sensibles y secas.
Entérate
Este polvo blanco brillante es originario de China y está compuesto sobre todo por un mineral, la caolinita. De ahí precisamente viene su otro nombre: caolín o arcilla de China, ya que durante siglos fue extraída de la montaña Gao-Ling.
Se piensa que cuánto más blanca, mejor es su calidad y pureza. Está considerada una de las arcillas más suaves debido a que sus partículas tienen un tamaño muy pequeño que encaja perfectamente en el mundo de la cosmética.
Pero además, también está demostrado científicamente su uso interno para problemas asociados con el tracto digestivo e intestinal.
El secreto de la arcilla
La sílice es un ingrediente muy popular en muchos productos de belleza y es el secreto rejuvenecedor de la arcilla blanca.
Este ingrediente promueve la producción de colágeno haciendo que la piel luzca firme y elástica.
La forma más común en la que suele usarse es en forma de mascarilla facial, con el objetivo de purificar profundamente los poros, descongestionar y tensar, además de proteger e iluminar el rostro.
Expertos recomiendan aplicarla al menos una vez a la semana si la piel está muy seca, pero no más de tres veces a la semana en el caso del cutis graso que quieran controlar la grasa y el brillo.
Su gran poder desintoxicante y antibacteriano es perfecto para volver a lucir una piel cuidada después de los castigos del sol y de la falta de hidratación del verano, aunque resulta fundamental en invierno, cuando las temperaturas extremas resecan e irritan la dermis.
Mascarilla
Sólo necesitas conseguir arcilla blanca en polvo y mezclarla con agua desmineralizada y sin cloro. Debes extender la mezcla por el rostro y dejarla actuar unos 15 o 20 minutos.
Al transcurrir el tiempo, la arcilla se retira con una esponja y agua tibia mediante suaves movimientos de arriba hacia abajo.
La arcilla blanca puede convertirse en una de tus aliadas y formar parte de tus rutinas de belleza.
Beneficios
– Eliminación de impurezas, toxinas y células muertas.
– Ayuda a la regeneración celular.
– Crea una piel fuerte y radiante para lucirla en todo su esplendor durante todo el año.
– Produce un efecto tensor, que también se puede fortalecer con ejercicios faciales.
– Aporta mucha luminosidad al rostro.
Limpiador natural
La arcilla blanca elimina la suciedad, toxinas e impurezas de los poros, causantes de las espinillas y los brotes. Además, previene los puntos negros y tiene la particularidad de que limpia la piel sin resecar ni dejarla tirante ni opaca, por eso se puede utilizar en la tez seca y sensible.
Exfolia suavemente
Elimina incluso las cantidades más pequeñas de suciedad, contaminantes y bacterias, al tiempo que promueve la regeneración de las células cutáneas, brindando un aspecto saludable y brillante a la piel apagada y cansada.
También controla los problemas de acné sin resecar ni causar enrojecimiento o irritación.
Calma la irritación
Alivia y suaviza la piel irritada, ya sea por erupciones cutáneas, por someterse a tratamientos agresivos o por la picadura de un insecto. Sus propiedades curativas calman cualquier enrojecimiento o erupción.
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Absorbe la grasa
Atrae las partículas de grasa adicional de la superficie de la piel, para equilibrarla y mantener a raya los puntos negros y las obstrucciones que generan brotes de acné.
Al eliminar el exceso de sebo reduce el brillo en la tez. Lo bueno es que solo controla el exceso de producción de sebo en la capa superficial y no afecta a su nivel de grasa natural ni al manto lipídico.
Unifica el tono
Al remineralizar las células cutáneas, éstas quedan estimuladas y lucen de manera uniforme, lo que se traduce en una apariencia más luminosa y radiante con un tono más homogéneo.
Tonifica y tensa
Estimula, tonifica y tensa al mismo tiempo la piel. También mejora la circulación sanguínea, promoviendo la regeneración cutánea y un cutis más oxigenado y descongestionado.
Usos
No sólo puedes utilizar la arcilla blanca para el rostro, también sirve para combatir el síndrome de las piernas cansadas, y es que, además de todo lo nombrado, la arcilla blanca posee propiedades vasoconstrictoras
Puedes tomar la arcilla blanca disuelta en agua y con ello regularás el pH intestinal. Además, es también común su uso como cataplasma en heridas o zonas irritadas.
La capa de cataplasma debe aplicarse sobre la piel, una capa de dos o tres centímetros de grosor y retirar cuando esté seca con una espátula que no sea de metal, pues al entrar en contacto con él, perdería sus propiedades, y después aclarar con agua tibia.
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2022-01-26
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