2001online.com |
Además de nutrir al organismo, una comida deliciosa genera en el cerebro estímulos y hormonas responsables para que las personas se sientan felices, sentimiento que también se logra y multiplica cuando esos platos se comparten en la mesa junto a la familia y las amistades. Tal afirmación la realiza el experto en Neurogastronomía, Merlín Gessen.
Según la Neurogastronomía, una disciplina que ha estudiado la manera en cómo se percibe el sabor y su relación con la memoria y los procesos cognitivos, las actividades realizadas en torno a la comida estimulan la producción de sustancias químicas, y además de alimentarse, brinda todo ese “coctel” de felicidad.
“En el momento que estamos en la mesa, comiendo con las personas que son importantes para nosotros, nuestro cerebro consigue su identidad, consigue las respuestas a esas preguntas sobre quiénes somos, de dónde venimos, a dónde vamos y quienes nos acompañan. Sólo en este momento nuestra mente da una instrucción tan poderosa que genera las cuatro hormonas de la felicidad: oxitocina, dopamina, serotonina y endorfinas”, señala Gessen.
2020-10-22
Para mantenerte informado sigue nuestro canal en Telegram https://t.me/Diario2001Online