¿Reutilizar para decorar? ¡Claro que sí! La belleza está en los ojos de quien la mira, reza el refrán. Y es totalmente cierto. Cuando vamos a decorar siempre pensamos en que será un gasto grande por todo lo nuevo que se debe comprar, pero si piensas así estás muy lejos de la realidad.
A los materiales usados se les pueden dar una segunda oportunidad, y siempre a favor de la belleza. Y para ello te hablaremos de la decoración con reciclaje, específicamente con cajas de madera. Que pudieran provenir de tus compras de frutas, verduras, o cualquier otro material que viene en estas versátiles cajas, y que se consiguen de todos los tamaños.
Aquí te explicaremos cómo puedes decorar diferentes áreas del hogar y darle una nueva utilidad a esos cajones que en un principio pensaste en desechar.
Reutilizar cajas
Escritorio
Forma práctica de sacarle provecho a las cajas viejas de madera. Une dos cajas colocando una sobre otra de forma ladeada para hacer la base del escritorio.
Con dos cajas a cada lado y una tabla de madera sobre ellas, tendrás una original mesa de estudio. No solo te servirán de base para el tablón o mesa, sino que serán tus nuevas gavetas expuestas que te servirán como archivador.
Para comenzar, debes limpiar muy bien la madera para eliminar cualquier sucio o desecho. Lo puedes hacer pasando un cepillo para luego proceder a lijar –si la madera está muy maltratada-.
Revistero
Este hermoso revistero lo conseguirás pintando la madera de tu color de preferencia. Lo puedes combinar con el tono de las paredes de tu hogar o con el color de los muebles.
Luego con un trozo de cuero, mecate o unas simple manillas usadas de algún mueble desechado, te servirán como agarradero. Le puedes incorporar unas ruedas o simplemente dejarlo directamente en el suelo.
Estantes
Según el tamaño y forma que tenga la pared donde los colocaremos, diseñaremos previamente la disposición de las cajas. Asegurándonos de colocar alternadamente cajas horizontales, verticales y jugando con los tamaños.
Puedes dejar la parte externa de la caja con la madera natural y pintar la parte interna de la misma, donde colocarás los adornos a tu elección. O simplemente dejarlas todas rústicas con el material de origen. Todo dependerá de tu estilo y gusto.
Mesa de centro
Cuatro cajas serán suficientes para tener una hermosa mesa de centro. Une entre sí los cajones de forma ladeada y por un costado y asegúralas con pequeños clavos. Siempre cerciorándote de que la abertura de la caja de hacia la parte externa de la mesa.
En la parte inferior de la mesa le incorporas con tornillos unas ruedas sencillas, que consigues en cualquier ferretería. Si lo que deseas es que la mesa se mueva. En el orificio central coloca una maceta para que tengas un toque decorativo y natural.
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