2001Online.com | Yamileth Niño
Si se quiere comprobar la sensibilidad de las plantas y comunicarse con ellas, resulta idea adquirir una mimosa púdica, una de las plantas de interior más sensibles.
Esta planta, con flores de bolitas de algodón rosa pálido, no solamente reacciona al tacto, sino incluso con la vibración de la voz. Si se toca sus hojas, éstas se pliegan al igual que se encojen cuando se habla con un tono de voz muy elevado y violento. Otras de las reacciones violentas propias de esta planta consisten en que, una vez plantada en una maceta de terraza o jardín, se adapta a su nuevo entorno pasado de una planta suave y sensible, a ser un arbusto fuerte y áspero.
Luz para cada planta
No todas las plantas requieren la misma luz. Las más exigentes, es decir, las que necesitan más luz solar son; las rosas, el exacum o violeta persa, el coleus, la veranera, el croton, el cyclamen o la bromelia, han de colocarse justo a la ventana.
Otras menos rigurosas, como la clivia, la begonia, embeleso, el philodendron o la dieffenbachia, pueden estar entre uno y dos metros de la ventana. Si se trata de plantas no muy altas, es recomendable colocarlas encima de un mueble para así poder aprovechar más la luminosidad de la habitación.
Por último, las plantas que ya no reciben luz natural, han de iluminarse artificialmente son; la hiedra, cadena chata y helechos son las que mejor viven en lugares con poca luz.
2020-08-26
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