Los múltiples beneficios del té la hacen la segunda bebida más popular y consumida del mundo.
Se ha convertido en la excusa perfecta para reunirnos con amigos y disfrutar de una humeante taza de té.
Por supuesto, sigue siendo un ritual gastronómico que representa todo un evento en la sociedad británica.
Pero, no solo en ese país, también ha pasado a convertirse en una costumbre habitual en nuestra urbe latina.
Las hojas del té negro se encuentran oxidadas y fermentadas. Sus exquisitos y relajantes aromas los convierten en la mejor compañía a cualquier hora del día, sin embargo, lo indicado es tomarlo media hora antes o 20 minutos luego de haber comido.
Beneficios
Previene el envejecimiento
Ayuda a la digestión
Desinflama el intestino
Disminuye la diarrea
Controla la diabetes
Regula la glucemia
Favorece la pérdida de peso
Ayuda a limpiar la piel
Protege el sistema cardiovascular
Ayuda a prevenir el cáncer
Propiedades del té negro
Muy estimulante, rico en minerales como fósforo, flúor, potasio, magnesio, hierro, manganeso.
Una taza al día es más que suficiente ya que aporta aproximadamente doscientos miligramos de flavonoides que es un tipo de antioxidantes presente también en frutas y verduras.
Además, reduce el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares ya que estimula el corazón y protege las paredes internas de las arterias.
Estimula el sistema nervioso, por su contenido de metilxantinas. Tiene efecto diurético, por lo que ayuda a eliminar la retención de líquidos.
Relaja los músculos de los bronquiolos, de modo que mejora la respiración.
Maneras de preparar el té negro
Ingredientes
1 cucharada de té negro
2 taza de agua
Medio limón
Miel para endulzar
Preparación
Ponga en una olla agua a calentar y agregue una cucharadita de té negro. Deje hervir a fuego bajo por 10 minutos. Retire del fuego, deje reposar y cuele. Agregue el jugo del medio limón y endulce a su gusto con miel.
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