Evita que las emociones controlen tu vida

Las emociones son reacciones que todos los seres humanos experimentamos y que no siempre logramos controlarlas por nuestros medios, a veces ellas nos dominan.

La alegría, tristeza, miedo, ira, etc., son solo alguna de esas emociones que podemos sentir y que incluso a veces nos pueden desbordar. Para evitar que ellas tomen el control de tu vida, te contamos qué puedes hacer.

¿Qué es controlar las emociones?

Aunque se cree que todos sabemos controlarlos cuando estamos alegres, molestos, o ansiosos, por ejemplo, la verdad es que en algunas oportunidades esto no siempre es así.

Saber controlarlas es gestionar los sentimientos y comportamientos. Es emplear una especie de técnica que te permita experimentar las emociones positivas o negativas, y expresarlas adecuadamente.

Es decir, permite dominar nuestros sentimientos y manejarlos de forma adecuada, y con ello, permite potenciar la autoestima, el orgullo y hasta la sensación de logro y éxito en la vida. Además, evitar conflictos y malos entendidos entre las personas del entorno.

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Recomendaciones

Cuando hablamos de que las emociones toman el control de nuestras vidas nos referimos a un episodio de alta emocionalidad que anula la capacidad de pensar con claridad, y esto nos lleva a actuar totalmente cegado por las emociones.

Para evitar que esto ocurre es necesario:

– Aprender a decir no.

– Mantener una actitud positiva que conduzca a un mayor control sobre uno mismo y el estado de ánimo.

– Evitar complacer a todo el mundo.

– Fomentar la comunicación de los pensamientos y sentimientos.

– Practicar técnicas de respiración y relajación.

– Piensa en las cosas buenas que has logrado y valora tu capacidad de respuesta.

– Realiza actividades que ayuden a subir tu autoestima.

– Busca siempre equilibrar la razón y las emociones.

– Ten paciencia contigo mismo.

En conclusión, es indispensable que aprendamos a tener control de las emociones y así no permitir que nos dominen, para ello, es clave no reaccionar de forma inmediata.

Esto requiere de mucha práctica, disciplina y autocontrol, que una vez se consigue, se logran grandes beneficios para el bienestar de todos.