Los accesorios del baño no deben quedar olvidados al momento de realizar la limpieza, pues estos son igual de importante que el lavamanos y la poceta, por ejemplo.
Éstos, generalmente la grifería, tiende a oxidarse o corroerse cuando no recibe el mantenimiento oportuno.
Para evitar que estas piezas tan importantes en tu sala de baño se oxiden, te ofrecemos algunos trucos para que las cuides.
Oxido en los accesorios del baño
La mayoría de los metales que están expuestos de manera continua a un desgaste causado por humedad, sal y cal, pueden oxidarse, y esto incluye a la grifería de los baños.
Gracias a todos esos elementos, es posible que los accesorios pierdan el brillo y hasta se desgaste el metal, y esto a su vez provoca que se vean de muy mal aspecto.
Es decir, griferías, llaves y hasta las manijas de puertas y gabinetes, sufren la corrosión debido a la humedad a la que están expuestos y suelen oxidarse con el tiempo.
Aunque es completamente normal, se puede evitar siempre y cuando se realicen labores de mantenimiento cada cierto tiempo.
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¿Qué hacer?
1. Pasar un paño de algodón limpio y seco por el grifo luego de cada uso, para así evitar que se acumule cal y humedad.
2. Realizar una limpieza periódica con productos como jabón neutro, agua tibia y productos especiales para el mantenimiento de los baños. No obstante, debes evitar aquellos productos que resulten abrasivos para el metal ya que contribuirán a quitarle brillo a la grifería.
3. Utilizar un paño con alcohol para desinfectar las griferías y las llaves y, después, enjuagarlos.
4. Optar por elegir griferías de acero inoxidable, que, aunque también necesitan de un mantenimiento periódico, son mucho más duraderas que las de metal.
5. Evitar el uso de fibras, productos pulidores, detergentes y toda clase de abrasivos como amoníaco, por ejemplo.
6. Preparar una mezcla de vinagre y agua tibia, sumergir un trapo en el recipiente y limpiar los grifos. Luego pasa un paño limpio y seco para secar y evitar que la pieza se oxide.
¡Adiós oxido!
En caso de que la grifería ya se encuentre oxidada, cubre la superficie con sal y exprime un limón sobre la zona afectada, deja actuar durante un par de horas, luego pasa un cepillo y aclara con abundante agua.
Finalmente, seca muy bien con un paño preferiblemente de algodón.
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2022-12-15
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