El cambur es una es una gran fuente de potasio. De todas las frutas y vegetales, esta es la que más contenido de potasio tiene. Controla los niveles de presión arterial en el organismo. Reduce significativamente los riesgos de enfermedades en el corazón.
Las frutas son un alimento que, al consumirlas, favorecerán nuestro organismo y salud. Si bien es cierto que la fruta debe comerse de manera natural y cruda para que nos aporte todas sus vitaminas, hacerlo en forma de compota no nos restará beneficios. Y si es para tu bebé, te aseguramos que a él le encantarán.
Esta receta que te presentamos hoy lo hacemos con cambur. Pero si a tu bebé no le gusta esta fruta, puedes elaborarla sustituyéndola por otra fruta pulposa de su gusto.
Entre las opciones pueden estar la fresa, la lechosa, el durazno, el melocotón, la manzana o la pera, entre otras. En el sabor está la variedad.
Te dejamos la manera de hacer una rica compota de cambur, que si es para tu niño puedes obviar de los ingredientes el azúcar y la fécula de maíz para que sea 100 porciento natural. Toma nota.
Dulce de cambur
Ingredientes
2 cambures.
Dos tazas de agua.
Azúcar, 2 cucharadas (opcional).
3 cucharadas de harina de fécula de maíz (opcional).
1 cucharadita de vainilla.
Preparación
– Pela los cambures y pica en rodajas. Agrégales un chorrito de jugo de limón para que no se oxiden.
– Licúa los trozos con el agua y la vainilla. En este paso le puedes agregar el azúcar y la fécula de maíz si lo deseas. La fécula hará que la consistencia de la compota sea más espesa.
– Lleva la mezcla a fuego lento, revolviendo de vez en cuando, hasta que llegue a la consistencia de espesor deseada.
– Vierte la mezcla en envases de vidrio individuales y refrigera, mínimo, dos horas.
¡Buen provecho!
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