El calabacín es una hortaliza muy versátil que aporta vitaminas y minerales que favorecen la salud del organismo. Consumir este alimento ayuda a combatir los radicales libres, protegiendo el cuerpo del envejecimiento prematuro y de ciertas enfermedades.
Realizar algunos platos con este alimento resulta sencillo, pero conviene hacerlo cuidando las técnicas para evitar la acidez característica de este alimento.
Si buscas opciones para el almuerzo, un falso pasticho de calabacín resulta práctico y delicioso.
En estas líneas te compartimos una receta y algunos consejos para que la elaboración resulte todo un éxito.
Ingredientes para el falso pasticho de calabacín
– Calabacín (1 o 2)
– Espinacas frescas (300 g)
– Requesón (350 g)
– Queso parmesano rallado (40 g)
– Salsa de tomate (400 g)
– Huevo (1)
– Ajo (1 diente)
– Pimienta negra recién molida (al gusto)
– Sal (al gusto)
– Orégano (al gusto)
– Aceite de oliva virgen extra (cantidad necesaria)
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Preparación
1. En una sartén calentar un chorrito de aceite de oliva virgen extra. Añadir las espinacas lavadas, bien escurridas y cortadas. Saltear las espinacas 2 o 3 minutos hasta que se ablanden.
2. Añadir el diente de ajo troceado y lo saltear con las espinacas 1 o 2 minutos.
3. Incorporar una pizca de sal, pimienta negra y orégano. Mezclar bien para integrar los aromas y sabores. Retirar del fuego.
4. Colocar las espinacas en un bol y una vez que estén templadas, incorporar el resto de ingredientes del relleno del pasticho. Añadir el huevo, el requesón y el queso parmesano. Mezclar bien hasta conseguir una crema homogénea. Reservar.
5. Lavar los calabacines, retirar los extremos y cortar en láminas finas, de 2 a 3 milímetros serían perfectas.
6. Extender una capa de salsa de tomate en la base de la bandeja que se utilizará para montar el falso pasticho de calabacín.
7. Sobre la primera capa de calabacín, extender la mitad de la crema de espinacas y queso parmesano. Poner encima la segunda capa de láminas de calabacín y cubrir con el resto de la crema de espinacas.
Hornear
8. Precalentar el horno a 200º C unos 5 minutos antes de meter el falso pasticho de calabacín.
9. Verter el resto de la salsa de tomate y cubrir toda la superficie. Espolvorear queso parmesano por encima.
10. Introducir al horno en la bandeja del medio unos 20 minutos a 180º C (bajar de 200º a 180º C) y 10 minutos con el gratinador para que se dore. Los primeros 20 minutos con temperatura arriba, abajo y aire. Los últimos 5 minutos sólo con el gratinador para que quede crujiente.
11. Adornar con un poco de orégano y espolvorear con un poco más de queso parmesano.
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2024-08-27
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