La cristalería es, sin duda alguna, la mimada de la cocina. Y no es para menos, ya que ésta puede decir mucho de los anfitriones en cualquier evento donde hay invitados, ya sea una ocasión formal o informal.
Se recomienda que la vajilla formal se lave a mano. El detergente también juega su papel. Se aconseja no usar detergentes abrasivos. Hay detergentes en pasta, con limón, que puros son perfectos para las ollas y diluidos en agua limpian delicadamente cualquier suciedad de los platos. La cristalería con cintas o adornos en oro o plata requieren un cuidado especial, distinto a la cristalería blanca o de un solo color. Las altas temperaturas podrían hacer que las cintas metálicas se ablanden.
Al lavar la cristalería a mano, lo mejor es hacerlo con una esponja suave. Lave su vajilla de mesa cuanto antes después del uso y hágalo de manera separada con los cubiertos, para evitar rasguños en platos.
Con la vajilla usada para el café o té, se debe tener el cuidado de lavarlos inmediatamente para evitar manchas; las comidas ácidas como vinagre, mayonesa, salsa tártara y huevos, también pueden dañar el color de loza si se deja durante períodos largos.
Al usar el horno se deben tomar en cuenta otras precauciones, lo mejor es evitar poner comidas congeladas directamente sobre la vajilla para calentarse en el microondas, ya que la variación de calor extremo puede hacer que el artículo se raje. Lo ideal es destinar cierta cristalería a usarse para calentar comidas en el microondas y usar solamente esos.
Nunca coloque la vajilla fría en un horno caliente precalentado o en el quemador de una variedad de gas o eléctrica. Este cambio de calor rápido puede hacer que el artículo se raje. Asimismo, no es recomendable poner la vajilla caliente dentro de un congelador, para evitar el choque termal. Algunas vajillas presentan líneas grises, esto se debe a los residuos dejados por la cubertería. Esto es fácilmente remediable con productos de limpieza.
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Consejos para mantenerla como nueva
1 Lavado. Hágalo a mano, en agua jabonosa caliente y con un buen detergente. Seque rápido con una tela suave. El cristal con acentos de oro o platino siempre debería ser lavado a mano.
2 Almacenado. Nunca lo haga al revés descansando en su tazón. El borde es la parte más delicada y es el más vulnerable.
3 Truco. Para quitar puntos de mineral aplique una pequeña cantidad de vinagre al agua. Un cepillo pequeño, suave, puede ser útil para limpiar el cristal que tiene surcos en el diseño.
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