Desde tiempos milenarios, la cúrcuma ha sido utilizada para colorear las comidas y como condimento alimentario en muchos platos. Sin embargo, esta especia obtenida de una raíz parecida al jengibre, no sólo sirve para impartir color amarillo a las preparaciones sino también para mejorar la salud y bajar de peso.
¿Por qué es tan buena para el organismo?
De acuerdo con diversas investigaciones, publicadas por el Centro Nacional de Información Biotecnológica de Estados Unidos (NCBI, por sus siglas en inglés), sus propiedades curativas se encuentran en la curcumina polifenólica, que es su ingrediente activo y el cual le confiere poderes antioxidantes, antiinflamatorios, antimicrobianos y antimutagénicos.
Tiene unos compuestos llamados curcuminoides que le convierte en un potente generador de propiedades medicinales. Además de grandes cantidades de proteínas, resinas, azucares, vitaminas C. E y K, niacina, sodio, calcio, potasio, cobre, magnesio, hierro y zinc. Es resumen es el mejor remedio natural que podemos tener en casa.
Beneficios
Combate la inflación y alivia el dolor
Mejora la circulación y previene la arterioesclerosis
Favorece el buen funcionamiento del hígado
Disminuye el colesterol
Ayuda a reducir los niveles de glucosa
Favorece la eliminación de toxinas
Sirve para las personas que sufren de encías sensibles
Aumenta la retención de la memoria
Protege las células del cerebro contra el envejecimiento
Ayuda a eliminar el exceso de mucosidad
Promueve un sistema digestivo saludable
Ayuda a la pérdida de peso
Gran aliado para combatir el cáncer
El rizoma posee al menos diez componentes anticancerígenos que se han conocido por diversos estudios de expertos, entre los que se destaca la curcumina y los betacarotenes. Todos ellos ayudan al organismo a protegerlo de varios tipos de cáncer y le proporciona resistencia en el tratamiento de la quimioterapia.
Agua de cúrcuma
El mejor jarabe natural que sirve para desintoxicar los pulmones. Solo tienes que poner una olla con un litro de agua mezclada con 400 gr. de azúcar o miel según su gusto, deja hervir y junto en ese momento añade 400 gr. de cebolla cortada y la raíz de jengibre rallada. Deje que vuelva a hervir y cuando llegue a estado de ebullición agrega dos cucharaditas de cúrcuma (30 gr.), baja el fuego y deja unos minutos más cocinar hasta que reduzca. Retira del fuego y deja enfriar un poco para luego beber. Se recomienda ingerirlo en la mañana en ayunas o entre las comidas.
Para mantenerte informado sigue nuestro canal en Telegram https://t.me/Diario2001Online