El “ningunfoneo” se ha vuelto muy famoso y motivo de diferentes estudios. ¿A qué se deberá?. El phubbing es un término que se ha popularizado en los últimos años. Se define así a la acción de ignorar a las demás personas por estar inmerso en algún dispositivo móvil. Esta palabra surge de la combinación de los términos ingleses phone (teléfono) y snubbing (ignorar). También se conoce como ningunfoneo.
Seguramente, has vivido esta situación. Incluso has sido quien la propicia.
La aparición de las redes sociales, juegos y millones de aplicaciones digitales, han hecho que mantenernos conectados a la red se haya convertido en una necesidad. De manera casi automática, revisamos nuestros equipos una y otra vez, aun cuando no tengamos notificaciones de mensajes nuevos. En las fiestas y reuniones también es muy común vivir esta situación. Las personas se reúnen con sus amistades y en lugar de aprovechar el tiempo para compartir o disfrutar de anécdotas, se encuentran chateando sin cesar. Éste comportamiento puede afectar las relaciones interpersonales, lograr que nuestros acompañantes se sientan menospreciados y dañar el momento.
Vivimos en una sociedad que tiene adicción a la tecnología. Por lo que niños, jóvenes y adultos terminan cayendo en este acto.
Las notificaciones constantes son una herramienta para mantenernos al día de lo que sucede en las diferentes plataformas. Sin embargo, se ha convertido en un llamado de atención que termina seduciéndonos para ingresar en el dispositivo cada cierto tiempo.
¿Puede traer consecuencias?
¡Por supuesto que sí!
Prestar atención constante al móvil genera distracción. Es prácticamente imposible leer un mensaje, por ejemplo, mientras mantienes una conversación cara a cara fluida. Puedes demostrar desinterés, mala educación y falta de respeto. Además, fácilmente se puede caer en un comportamiento adictivo. Algunas de las consecuencias son:
Desmejora de las relaciones sociales y familiares.
Adicción.
Ansiedad.
Bajo rendimiento escolar y laboral.
Descuido de las rutinas habituales como dormir, realizar tareas del hogar, comer, entre otras.
Reducción de la concentración.
Según la plataforma Stop Phubbing, el 90% de los adolescentes prefieren la comunicación virtual que la personal. Por supuesto, muchas cosas se han vuelto parte de esta era, entre ellas el bullying. Es por esto que algunas personas se sienten más cómodas en el mundo de la red. La internet les da la posibilidad de ir de manera digital a donde quieran, cuando quieran, bajo el nombre que deseen y sin moverse de su casa u oficina; dando pie a la timidez y convirtiéndolos en afectos a situaciones que no siempre son reales.
¿Cómo se puede evitar?
Desprendernos de los dispositivos móviles puede resultar complicado. Muchos niños se han acostumbrado a no salir sin su tablet dentro del bolso. Por esto, es muy común que en las fiestas infantiles se mantengan sentados y no compartan con los demás. En la gran mayoría de los casos, los padres les han creado este hábito al dejarlos mantenerse conectados por largas horas. De esta manera, estarán entretenidos mientras ellos resuelven otros asuntos. El problema radica en que los niños no sabrán tener un equilibrio y necesitarán que sean sus representantes quienes establezcan límites.
-Marca horarios para que tus hijos tengan acceso a la tecnología. Asimismo, establécelos para ti.
-Coloca el móvil en silencio cuando te encuentras compartiendo entre familia o amigos.
-En medio de algún encuentro, invita a tus amigos a dejar sus teléfonos en un sitio apartado. Pueden hacer alguna dinámica y perderá el primero que se acerque a buscarlo.
-Evita entablar discusiones por esa vía. El mensaje podría ser malinterpretado y aumentar el conflicto. Promueve la resolución de diferencias cara a cara.
-Prohíbe su uso durante la comida.
Recuerda que el tiempo no se regresa. Por estar revisando las publicaciones de tus contactos, por ejemplo, podrías estar perdiendo momentos de calidad con las personas que te rodean. ¡Toma medidas!
Recomendaciones:
Evita el uso del smartphone cuando te encuentres acompañado.
Sabemos que las fotografías son recuerdos agradables y nos permiten revivir buenas experiencias. Sin embargo, se dice que de los mejores momentos no hubo capturas pues se estaba demasiado ocupado viviéndolos. ¡Así debería ser! Disfruta cada situación sin querer compartirlo todo a través de las redes sociales.
Explica a tus hijos las ventajas y desventajas de la internet.
Sé tú quien controle la tecnología y que no sea al revés.
Por: Karla Guzmán Guzmán
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