Pequeño insecto en tamaño, pero gigante en su importancia para el buen desarrollo de la humanidad, responsables de uno de cada tres frutas que consumimos en el mundo.
Las abejas son trabajadoras incansables, y gracias a su arduo trabajo, los humanos tenemos mucho alimento en la tierra. Pero estas polinizadoras podrían estar en peligro. Por ello, te traemos los datos más curiosos sobre estos lindos animalitos que nos suministran miel, para crear concienciación sobre su especie.
Curiosidades sobre este insecto
1. La abeja reina es la única que puede poner huevos, y su vida puede durar hasta cinco años. Durante el verano es cuando más huevos ponen, unos 2.500 al día, y cuando su productividad baja, es el apicultor quien la sustituye en la colmena por otra más joven y reproductiva. Cuando están en la naturaleza, las hembras obreras eligen larvas de menos de tres días de vida para sustituir a la reina no productiva.
2. Las celdas de las colmenas de este insecto tienen forma hexagonal debido a que optimizan el espacio y mejor movimiento para ellas. Si la celda fuera cuadrada, las abejas no podrían ingresar cómodamente a su interior dada su morfología, y si por el contrario la celda fuera redonda, la estructura no sería segura, podría colapsar y quedarían muchos espacios vacíos a rellenar con cera. La forma hexagonal en la más eficiente y óptima en una colmena.
3. Más del 75 % de los cultivos alimentarios del mundo dependen en cierta medida de la polinización. Los polinizadores, como las abejas, mariposas, pájaros, polillas, escarabajos e incluso los murciélagos, ayudan a que las plantas se reproduzcan.
4. Son capaces de distinguir todos los colores excepto el rojo. Poseen dos ojos compuestos que les permiten ver mejor los movimientos, y tres ojos simples, llamados ocelos. En total, cada abeja cuenta con cinco ojos.
5. Los polinizadores no solo contribuyen directamente a la seguridad alimentaria, sino que además son indispensables para conservar la biodiversidad. Asimismo, sirven para alertarnos sobre los nuevos riesgos ambientales, indicando la salud de los ecosistemas locales.
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6. El insecto melífera pasa la mayor parte de su vida en vuelo, y lo hace a una velocidad promedio de 25 kilómetros por hora, por lo que deberá batir sus alas 200 veces por segundo para lograr estas extraordinarias cifras.
7. Las abejas tienen la capacidad de reconocer caras. En un estudio realizado, se pusieron carteles con distintos rostros y detrás de ellos se añadía una gota de un endulzante atractivo para las abejas. Una vez habían sido entrenadas, se reemplazaban algunos rostros por dibujos de puntos y rayas. Sorprendentemente las abejas siguieron yendo hacia los carteles con rostros en busca del endulzante.
8. En el mundo existen más de 20 mil especies de abejas, pero solo siete de ellas son capaces de producir miel, entre las que se encuentran las abejas melíferas occidentales. Estas producen 1.6 millones de toneladas de miel al año, y cada una de ella puede visitar unas 7 mil flores al día para recolectar el néctar, en unos 4 millones de visitas a flores para producir un kilo de miel.
9. Desafortunadamente, las abejas al clavar su aguijón morirán. Las obreras inyectan el 50% del veneno al momento de clavar el aguijón, el resto fluirá de él poco a poco. El aguijón al tener forma de sierra, al usarlo no podrán recuperarlo, y al no poder hacerlo perderán parte de sus órganos vitales, muriendo en pocos minutos. Por otro lado, las abejas reina tienen un aguijón atrofiado, mientras que los zánganos ni siquiera tienen aguijón.
10. Hay abejas que su única función es la de ser sepultureras. Sí, así como lo lees. Un porcentaje pequeño de abejas en el panal desarrollan un patrón cerebral que les lleva a buscar en la colmena las abejas muertas. Ellas se encargarán de buscarlas y sacarlas del lugar. De esta forma la colmena permanecerá limpia y ordenada.
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