La alergia en el perro es una de la principales causas por la cual este asiste a consulta médica, ya que, al igual que los humanos existen factores externos que influyen en él para desarrollar problemas en la piel.
En ese sentido, de acuerdo a lo comprobado científicamente algunas razas de perros son más vulnerables a desarrollar alergias que otras, entre las más propensas a contraer este problema de salud se encuentran: Labradores retriever, Bulldogs y los Terrier irlandés, esto debido a que tienden a tener una genética débil ante este tipo de enfermedades.
Síntomas de alergias
Picazón en la piel: Esto generará que el perro se rasque con frecuencia, lama o muerda sus partes en exceso. También puede ocasionar caída del pelo y enrojecimiento cutáneo.
Estornudos o goteo nasal: Factores como el polvo o el polen generan goteo nasal de manera inmediata en los caninos, sin distinción de razas.
Problemas digestivos: Diarrea y vómitos frecuentes en el canino generan una alerta a quienes cuidan de él, dado que, esto no debería ser cotidiano en su salud. Por ende, ante esta situación se recomienda mantenerlo hidratado lo más que se pueda hasta que el médico indique tratamiento para combatir la infección.
Dificultad para respirar: Dependiendo del tipo de alergia que presente el canino, puede generarle asma y dolor en el pecho, esto debe atenderse rápidamente con tratamiento médico.
¿Las alergias en el perro se curan o se controlan?
Se controlan con tratamientos abrasivos para detener la prolongación de la misma, esto con la finalidad de garantizar una mejor calidad de vida al canino.
En definitiva, la detención temprana de alergias en el perro ayudará a que este cuente con un tratamiento eficaz, cuyo propósito será combatir la durabilidad de la infección en el mismo.
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