El trastorno obsesivo compulsivo (TOC) en los niños es tan común como en los adultos. Quienes tienen este padecimiento tienen pensamientos excesivos, que llevan a comportamientos repetitivos.
Trastorno obsesivo compulsivo en niños
Este padecimiento se caracteriza por la presencia de ideas obsesivas y patrones de conductas compulsivas con una frecuencia e intensidad capaz de interferir en la vida del niño que lo padece.
Expertos señalan que independientemente de la edad que tenga quien lo padece, no pueden dejar de obsesionarse con pensamientos o imágenes en su mente, y su comportamiento generalmente es repetitivo.
El TOC se presenta con mayor frecuencia en asuntos como el miedo a los gérmenes o la necesidad de organizar ciertos objetos de una determinada manera.
Síntomas
Pueden manifestarse de manera gradual y variar a lo largo de los años. Las manifestaciones más comunes son:
– Miedo a la contaminación o la suciedad.
– Necesidad de tener las cosas ordenadas y simétricas.
– Pensamientos no deseados, incluida la agresión, entre otros.
– Lavado y limpieza constante.
– Comprobación de ciertas acciones como cerrar la puerta o apagar la luz.
– Recuento.
– Seguir una rutina estricta.
De interés
Aunque en la mayoría de los casos el trastorno obsesivo compulsivo suele comenzar en la adolescencia o en la edad adulta joven, también es completamente viable que inicie en la infancia.
Especialistas indican que los síntomas suelen comenzar progresivamente y pueden variar en su gravedad a lo largo de la vida.
Diagnóstico
De acuerdo a los síntomas que se perciban en los niños, será necesario que los evalúe un profesional de la salud mental infantil y que sea este quien determine si realmente se están en presencia de un caso de TOC.
Pues, dichas obsesiones y compulsiones no son el resultado de los síntomas de otros trastornos mentales como esquizofrenia o trastornos afectivos, por ejemplo.
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¿Cómo se distingue de los juegos infantiles?
Estudios demuestran que en la infancia existen juegos con componente obsesivo o compulsivo.
Por ejemplo, no pisar las baldosas de un determinado color, contar repetidamente los coches que pasan por una calle, etc.
Esos juegos pueden llegar a ser muy repetitivos. La diferencia con los síntomas del trastorno obsesivo compulsivo es que, tanto el juego en si como el interrumpir el juego, no producen ansiedad o angustia.
Cuando son síntomas de trastorno obsesivo compulsivo, su interrupción produce mucha ansiedad en el niño; y en este caso se debe buscar la ayuda necesaria.
Tratamiento
Debe adaptarse a las características de cada paciente. Se debe valorar la naturaleza, gravedad, frecuencia e intensidad de los síntomas.
Asimismo, se deben tener en cuenta el nivel de desarrollo del niño y el impacto del trastorno en la vida diaria del paciente y de la familia.
Los tratamientos que han demostrado tener eficacia sobre las obsesiones y compulsiones son la terapia cognitivo-conductual y el tratamiento con medicamentos antidepresivos.
Cabe acotar que esta información es solo referencial, por lo que si sospecha de que sus hijos u otro miembro de la familia están presentando TOC, consulte con un profesional lo antes posible.
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2022-06-20
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