La cúrcuma es un rizoma que se cree es originario de la India. Se utiliza desde hace más de cuatro mil años en la gastronomía y también en la medicina, para el tratamiento y alivio de diversas enfermedades.
Esta raíz es uno de los alimentos científicamente más estudiados gracias a sus grandes beneficios al cuerpo humano. Su té combina exitosamente potenciadores que exaltan sus propiedades, ya que aumentan la biodisponibilidad de sus enzimas en cada célula.
La parte medicinal de la cúrcuma son las raíces tuberosas o rizomas, que consisten en uno principal, de forma ovalada, y rizomas secundarios de forma cilíndrica, tiernos, y color amarillo por fuera, anaranjado por dentro.
Su origen es incierto, pero se cree que procede del Asia Sudoriental. Hoy día se cultiva principalmente en la India, China y Vietnam, pero también en Indonesia, Brasil, Nicaragua, Perú, y las islas Hawái, entre otros. La cúrcuma de Java es originaria de esa isla indonesia.
Beneficios para el organismo
– Puede restaurando los códigos genéticos celulares llegando al nivel del ADN, haciendo que se reproduzcan, deteniendo el deterioro de las células. De allí su poder antienvejecimiento.
– Sus poderes antiinflamatorios protegen al organismo de la infamación sistémica mejorando o eliminando los dolores y enfermedades crónicas, trastornos degenerativos y Alzheimer.
– La curcumina puede inhibir el desarrollo de las células cancerígenas y elimina o disminuye la propagación de la enfermedad a nivel molecular, así como también reduce el crecimiento de vasos sanguíneas nuevos en tumores y la metástasis.
– Mejora la energía, la capacidad de oxidación de las grasas y la glucosa, y es un gran desintoxicante del hígado.
– Mantiene el pH de la sangre y es un potente fungicida.
– Previene los descontroles hormonales, controlando y equilibrando la prolactina.
– Reduce la acidez estomacal, mejora la digestión y aumenta la secreción del flujo biliar.
– La curcumina mejora la cognición, es antideresiva y previene el Alzheimer.
– Mejora la oxigenación de los tejidos, la calidad de las arterias, lo que lo hace un afrodisíaco natural
Beneficios estéticos
El consumir té de cúrcuma puede influir positivamente en nuestra apariencia mejorando la calidad de nuestra piel. Puede eliminar las manchas causadas por la edad, aumenta la producción de colágeno, lo que nos ayudará a evitar las líneas de expresión, frenando los efectos del paso de los años. Equilibrará el tono y color de nuestra tez y tiene un gran efecto liposucción, reduciendo los niveles de grasa de nuestro cuerpo al evitar la expansión del tejido adiposo, impidiendo la irrigación sanguínea en este tipo de tejidos.
¿Cómo tomar el té de cúrcuma?
Esta bebida se puede tomar todos los días y a cualquier hora. Para comenzar, puedes tomar de una a dos tazas al día, ya sea caliente o frío, acompañando tus comidas o solo como un rico y saludable refrigerio.
Al prepararlo, debes hervir la cúrcuma en agua para que libere todos sus ingredientes y propiedades. También puedes preparar un rico té de cúrcuma acompañado de tu fruta o especia preferida.
Mejores combinaciones para el té de cúrcuma
Cúrcuma con piña
Ingredientes
1 taza de agua.
Una cucharadita de polvo de cúrcuma.
Piña con todo y cascara, 1 trozo.
Canela al gusto.
Preparación
Agrega todos los ingredientes al agua y deja hervir por 5 minutos.
– Puedes servir frío o caliente.
Cúrcuma con nuez moscada
Ingredientes
Agua, 1 taza.
Polvo de cúrcuma, 1 cucharadita.
Canela en polvo al gusto.
Un toque de nuez moscada.
Leche de coco.
Preparación
– Agregamos todos los ingredientes al agua (menos la leche de coco), y dejamos hervir 5 minutos.
– Servimos caliente con un poco de leche de coco.
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