Al tener problemas de visión como ver con dificultad, no hay ejercicio que pueda revertir eso. Lo que sí se puede lograr es prevenir problemas oculares, evitar el cansancio visual y la resequedad en los ojos.
Hoy más que nunca estamos pegados frente a diferentes equipos electrónicos, y ese abuso hace que nuestra vista se canse, nublándola, irritándola u resecándola.
Así como ejercitamos nuestro cuerpo para mantenerlo sano y en forma, del mismo modo deberemos preocuparnos por nuestros ojos. La gimnasia visual puede prevenir o aliviar problemas menores, haciendo más efectiva nuestra visión.
Beneficios de la gimnasia visual
– Hacer ejercicios para la vista hará descansar, relajar tus ojos y los músculos alrededor de este órgano sensorial.
– Prevendrá o minimizará la fatiga visual causado por la constante exposición a pantallas digitales. Esta fatiga es la causante de los ojos rojos, lagrimeo excesivo y resequedad ocular.
– Con estos ejercicios relajarás la mente al mismo tiempo, lo que aliviará los niveles de estrés y ansiedad.
– Mejorará la movilidad ocular.
Ejercicios para la visión
Parpadeo
Cierra los ojos y relájalos. Luego ve abriendo muy lentamente hasta que sientas que los párpados se han despegado. Vuelve a cerrar completamente. Repite 10 veces. Si te encuentras en un lugar donde no puedes relajar adecuadamente los ojos, simplemente parpadea de forma rápida y vigorosa. Esto descansará la vista de la exposición a la pantalla del ordenador, entre otros objetos electrónicos.
Palmeo de ojos
Relaja la vista, y con los ojos cerrados, cubre tus ojos con las palmas de tus manos en forma ligeramente cóncavas, de manera que no presionen tus ojos. Respira profundamente mientras relajas el cuerpo.
Cambio de mirada
Sin mover la cabeza y con los ojos abiertos, gira los ojos hacia arriba y luego hacia abajo. Haz lo mismo pero dirigiendo la mirada de izquierda a derecha, y luego muévelos en forma circular. Esto te permitirá ejercitar los músculos que rodean el ojo. Repite tres veces con los ojos abiertos y luego tres veces más con los ojos cerrados.
Enfoque
Mira fijamente un objeto distante por unos segundos y luego fija la vista en otro objeto cercano (a menos de 30 centímetros), y preferiblemente en la misma dirección que el objeto lejano. Repite ambos enfoques unas 20 veces, manteniendo su enfoque por varios segundos.
Adaptación
La adaptación a la distancia se basa en enfocar nuestra mirada en un objeto, y al mismo tiempo, trata de ver todo lo demás que hay alrededor y que se encuentra en el plano, sin dejar de ver el objeto principal. Esto te permitirá ver de forma natural diferentes objetos a diferentes distancias, sin forzar el enfoque.
Masaje
Ejercicio que deberás realizar con delicadeza, pero que te será muy útil para relajar la vista. Con los ojos cerrados, masajéalos con las yemas de los dedos durante 2 o 3 segundos, presionando muy suavemente con tres dedos los párpados superiores. Repite cinco veces.
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