Sin miedo la oscuridad, la mayoría de los pequeños suelen tenerle miedo, así sea parte de la imaginación de los más pequeños de la casa cuando están atemorizados
Esa sensación que eriza la piel e invade el cuerpo y la mente de los niños, puede ser producida por algún evento que ya ocurrió, que puede estar sucediendo, o que podría pasar y provoca ansiedad y reacciones difíciles de controlar.
Sin embargo, el miedo de la infancia puede prepararlos en un futuro a que le hagan frente a experiencias y situaciones retadoras en la vida.
Reacciones
Parálisis, ataques de ansiedad, sudor frío, terror, es lo que experimenta el niño y, por lo general, es por algo que no es real, producto de su imaginación infantil; como los temidos monstruos debajo de la cama o detrás de las cortinas.
El miedo es normal
Cada etapa de la infancia a la niñez, está caracterizada por miedos infantiles que son normales y no deben preocuparte, siempre y cuando sigan un patrón de conducta normal. En la medida en que el(la) niño(a) va creciendo y madurando, irán desapareciendo sus temores sin dejar secuelas.
Herramientas
Para ayudarlos a que afronten sus miedos, es necesario enseñarles a autocontrolarse, a ser autónomos, a tener iniciativa y confianza en sí mismos; una vez vencidos los obstáculos, podrán avanzar solos, sin temores.
Ayudar con paciencia
– Supervisa los programas que ve por cualquier medio y procura que no sean películas ni series que contengan imágenes o situaciones de miedo.
– Crea un ambiente agradable y sereno en el momento de ir a dormir, y evita los juegos excitantes.
– La luz se debe suprimir de forma progresiva; primero con una lámpara encendida en la mesa de noche, y después con un regulador de luz o la luz del pasillo, hasta suprimirla por completo cuando haya superado su miedo.
– Es importante escuchar a los niños con atención. Algunas veces, simplemente hablar sobre el miedo, puede ayudar a que lo supere.
Visita nuestra sección Zona3D
Para mantenerte informado sigue nuestro canal en Telegram https://t.me/Diario2001Online