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La primera mujer juez de la Corte Suprema de Estados Unidos, Sandra Day O’Connor, ha ayudado a impartir instrucción cívica a millones de estudiantes mediante videojuegos creados por una organización que ella fundó. Ahora, gracias a la primera juez hispana de la corte, Sonia Sotomayor, el grupo ha traducido uno de sus juegos al español.
El grupo iCivics, fundado por O’Connor en 2009 luego de su retiro de la corte, tiene 19 videojuegos que fueron utilizados por 5 millones de estudiantes el año pasado. Sotomayor, cuya lengua materna es el español, es miembro del directorio de la organización desde 2015. Una de sus primeras iniciativas ha sido volver los juegos de iCivics más accesibles a los estudiantes que aprenden inglés y otros que tienen dificultades con la lectura.
O’Connor y Sotomayor no estuvieron juntas en el alto tribunal, pero encontraron una vocación común al promover la instrucción cívica en las escuelas.
“Para mí, la educación cívica es clave para inspirar en los niños el deseo de iniciar y provocar cambios” en el país, dijo Sotomayor en un evento en septiembre.
Los juegos creados por iCivics enseñan a los estudiantes temas que van desde el funcionamiento de los tribunales hasta la participación en un jurado, pasando por el proceso de elaboración de leyes y el funcionamiento de una campaña electoral a la presidencia. Sotomayor pronostica que iCivics “cambiará a Estados Unidos” y puede ser “el legado más perdurable” de O’Connor.
En el juego de iCivics actualizado en español "Do I Have a Right?" (¿Tengo derecho?), los jugadores dirigen un bufete de abogados. Escuchan las versiones de sus clientes, deciden si se han violado sus derechos constitucionales y en ese caso los refieren a abogados especializados. Desde su lanzamiento en 2011, lo han jugado casi 9 millones de veces, según iCivics.
La actualización en español va dirigida a casi el 10% de la población estudiantil pública, unos 4,6 millones de alumnos, clasificados como lectores en inglés.
En una jornada escolar reciente, los estudiantes de 11mo grado (penúltimo de secundaria) en una clase de historia en la escuela Theodore Roosevelt en Washington, casi todos inmigrantes centroamericanos, dedicaban tiempo a responder la pregunta “¿qué es un derecho?” y dar ejemplos antes de jugar en parejas.
Algunas parejas optaban por jugar en inglés, otras en español. Otras pasaban de un idioma a otro. La nueva versión incluye un glosario de términos legales y optativamente una voz en inglés.
Zayra Granados, inmigrante salvadoreña de 17 años que llegó a Estados Unidos hace cuatro, jugaba en español. Una pregunta era si la ley podía obligar a un periódico a publicar solamente buenas noticias o si tenía derecho a informar sobre los indigentes. Su conclusión fue que el diario podía informar sobre la indigencia.
“La gente debe saber lo que sucede en su país”, dijo.
Al finalizar el período, con su pareja habían logrado un récord ganador con ocho casos ganados y siete perdidos.
“Quiero aprender sobre las leyes y cosas así para conocer mis derechos”, dijo.
La directora ejecutiva de iCivics, Louise Dube, dijo que el objetivo es que todos los juegos sean accesibles a los estudiantes que están aprendiendo inglés, aunque no tienen un plazo. El costo de las modificaciones hasta el momento fue de 400.000 dólares, y tendrán que recaudar más fondos para seguir con los cambios.
O’Connor, de 87 años, dijo en un comunicado que su objetivo es llegar a todos los estudiantes del país a través de iCivics.
“Para eso, tenemos que satisfacer las necesidades de todos los educandos, incluso los que tienen problemas con la lectura”, dijo. “Estoy encantada con el nuevo juego”.
2017-11-24