Vine, la nueva aplicación de video de Twitter que permite a los usuarios grabar y compartir clips de seis segundos, ha generado una masiva y mediática reacción en su primera semana de funcionamiento. ¿Por qué?
Los más atrevidos la han denominado la "Instagram para video", en alusión a la aplicación para compartir fotos que Facebook compró por US$ 1.000 millones el año pasado.
No es el primer servicio de minivideo compartido. Desde 2010 existe Tout, que permite a los usuarios enviar 15 segundos de video, y también está Cinemagram, que crea versiones animadas de fotos.
Pero el impacto de Vine, con el poderoso apoyo de Twitter, ha sido casi inmediato.
Habrá muchos que no se dejan impresionar por la idea de compartir vídeos de seis segundos y considerarán la aplicación como un nuevo bastión completamente mundano.
Pero deberán acostumbrarse a escuchar cada vez más sobre el tema. /BBC MUNDO
(MM)