Ángel Sanguino, un caraqueño habitante de Catia, es el inventor de una prótesis de brazo capaz de cumplir las mismas funciones de una mano humana, como encender una luz, sujetar un teléfono, subir y bajar un codo, un hombro, e incluso manejar un carro, lo cual puede lograrse con el movimiento de la clavícula humana, adaptada a un sensor, que por los momentos, está programado para recibir algunas órdenes, aunque al colocarle una memoria podría cumplir 16 o más funciones.
"Tengo prácticamente un taller de electrónica en el brazo", comenta este innovador popular para comenzar a describir este prototipo, que adaptó a su brazo izquierdo hace algunos meses.
La idea se paseó por la mente de Ángel, desde el 21 de mayo del año 2012, cuando perdió su brazo izquierdo en un accidente de tránsito. Desde entonces, pensó en la posibilidad de construir una prótesis que fuera poco convencional y que le permitiera continuar labores en su taller mecánico.
"Mientras estaba hospitalizado me ofrecieron opciones de prótesis cosméticas, pero pensé que aunque tenía esta condición necesitaba retornar al campo laboral de forma eficiente", cuenta Ángel, quien se graduó de técnico en equipos móviles.
Este amante de la tecnología y la innovación refiere que la mayoría de las prótesis que adquieren pacientes venezolanos con alguna discapacidad son importadas de Inglaterra y Alemania, aún cuando el país cuenta con las herramientas para hacerlas en el territorio nacional.
Ángel rechaza la concepción de diseñar prótesis que sólo cumplan una función estética. "A mí no me sirve una mano que parezca humana y no funcione, me sirve más una que funcione aunque no parezca humana", destaca.
Explica que la innovadora prótesis está hecha con materiales de ortopedia. "Estos tubos son una aleación de acero y aluminio traído de afuera (de otros países), ¿qué pasa con esta aleación? que si la agarras y la pones aquí (en la prótesis) no le pasa nada, pero si le das con un martillo lo parte".
Y prosiguió: "Yo no necesito una prótesis que sea sobre humana. A mi no me sirve un tubo que pueda partir un vidrio, me sirve un tubo que me pueda sujetar un brazo, un cuchillo, un tenedor".
Al respecto, argumenta que su proyecto se ejecutará con materiales nacionales, lo que permitirá disminuir los costos de esta herramienta, que en el mercado capitalista tiene un costo de 90.000 bolívares, mientras que esta nueva prótesis oscila entre los 2.000 y 5.000 bolívares.
"Uní todas las herramientas que utilizaba en mi taller de electrónica y las adapté a mi prótesis. Tengo una lupa con una lámpara que me permite alumbrar lo que estoy utilizando, sin necesidad de usar una lupa externa; todo lo tengo aquí", dice al exhibir su prototipo.
Este jueves 16 de mayo, este tecnólogo popular mostró su creación en la Plaza Los Saberes de Caracas, con motivo del II Encuentro de Emprendedores e innovadores de la Robótica y Automatismo, que se realizará hasta este viernes 17 de mayo.
Ángel sueña con poner esta prótesis al alcance de todas las personas que la necesiten, por ello, este espacio servirá para presentar su prototipo ante el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación, con el objeto de conseguir el financiamiento necesario para esta tarea.
La actividad también abre espacios para que participen estudiantes de primaria, secundaria, universitarios, innovadores y tecnólogos populares, donde 132 expositores muestran prototipos puestos en práctica con su ingenio./ ANV
17/05/13