La codependencia es la necesidad de dar total atención a una persona, un lugar o algo fuera de quien presenta esta condición y se caracteriza por una negación inconsciente de las emociones.
Rosa Pellegrino, psicólogo del Centro Comunitario de Aprendizaje (Cecodap), en conversación con 2001, señaló que este trastorno psicológico consiste en que una persona posee un sentimiento de responsabilidad en “un nivel obsesivo”.
Igualmente se debe por vínculos estrechos hacia otra persona hasta un nivel en el que el afectado deja de lado sus propias necesidades e intereses para lograr complacer a terceros.
Pellegrino explicó que esta situación es muy visible en relaciones en las que un individuo requiere un cuidado.
Esto debido a que sufre de una discapacidad que no le permite valerse al 100 % de sí mismo, y el cuidador es quien puede desarrollar un vínculo de codependencia.
Es decir, siente una necesidad insistente de estar a cargo, de controlar, cuidar o hacerse responsable de la protección y el cuidado de un individuo que requiere de una asistencia constante.
La especialista indicó que este trastorno no aparece solo en adultos, sino también en menores de edad.
Origen de la patología
Ocurre en el contexto en el cual un familiar o un allegado pasa por un acontecimiento complicado, como una enfermedad física o un cuadro depresivo.
El niño adopta el rol de cuidador y empieza a asumirlo como su principal y única responsabilidad, y “ahí es donde se origina una codependencia”.
El portal web de Quora reseñó que la raíz de esta condición mental puede provenir de una familia disfuncional.
Es decir, en el que el codependiente no sintió suficiente cariño o atención dentro del seno parental.
Se forja a partir de requerimientos no saciados en el ser humano desde su etapa más joven.
Esto impide un crecimiento emocional adecuado, lo que lleva al infante a desarrollar un “falso yo” con el fin de buscar aprobación o validación de terceros.
Asimismo, la psicóloga refirió que el inicio de esta enfermedad se debe a la urgencia que experimenta el afectado al sentir una necesidad extrema de cuidar.
También de proteger a terceros, bien sea, familiares, amigos o pareja sentimental.
Pellegrino también añadió que las causas pueden variar, pero la más común es la baja autoestima del patológico.
Provocado a que el momento en el que la situación haga sentir al individuo útil, querido o indispensable, se va a obsesionar con esa sensación.
Resaltó que para evitar este trastorno es necesario ubicar y enfocarse en aquellos aspectos positivos de la personalidad y fortalecer el amor propio.
La especialista señaló que la persona receptora de esta codependencia también resulta afectada por este cuidado excesivo.
Tal situación ocurre porque la asistencia obsesiva del supuesto cuidador afecta la autonomía del que recibe esta sobreprotección.
Atención profesional relacionada a la codependencia
La Fraternidad de Codependientes Anónimos Mundial, la cual es una organización que tiene como fin tratar a personas con este problema, trabaja para asegurar la continuidad de sus miembros.
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Sen encargan de “llevan mensajes a los que sufren para enseñarles el valor del amor propio”, así lo señala el portal web www.coda.org.
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