Heilis Oriana González | [email protected]
Encargados y dueños de tiendas dedicadas a la venta de trajes de baño aseguran que las ventas han disminuido en un 60% y que se han visto en la obligación de invertir en otras prendas o productos para no cerrar sus puertas.
Consideran que las ventas que tienen son gracias a las alternativas y telas de licra que utilizan para hacer un arte a la hora de confeccionar las prendas, además de un buen forro.
Así como también expresan que las novedades, la diversidades y tendencias de este año son en su mayoría los trajes de baño completos modelos variados y actualmente en el mercado.
Además manifestaron que lo importante en cuanto a la creación de nuevas prendas es satisfacer a cada cliente y que llene las expectativas, para que vuelvan a contratar los servicios. También indicaron que los clientes ahorita buscan lo más práctico: sentirse cómodos con el diseño o modelo.
Ornela Marín, dueña de Inversiones R., dijo que "ahorita yo estoy trabajando por encargo para que las piezas no se me queden en el local y así garantizo la venta de mi traje de baño".
Fernando Guillén, encargado de Creaciones Ángel, comentó que “todas nuestras creaciones son 100% venezolanas para mayor confianza y originalidad”.
Kimberli González indicó que “yo trabajo por encargo y lo que más están pidiendo son trajes de baño con el bikini alto en colores variados, de estampados o colores metalizados”.
Hunice Palma, encargado de Inversiones Addeireaye, comentó que “somos fabricantes al mayor y al detal, mujeres venezolanas trabajando por un país mejor apostado aquí en Venezuela”.
Habla la gente. Georgina Medina dijo que “yo prefiero gastar el dinero en comida que comprar un traje de baño nuevo”.
Carmela Santaella afirmó que “ya las prioridades son otras, es muy difícil comprar un traje de baño, ahorita lo que se hace es remendarlo”.
Por su parte, Francis Oropeza comentó que “es imposible con estos precios tan altos se pueda adquirir un traje de baño, cuando puedes llevar comida para la casa”.
Yalitza Scott aseguró que “en años anteriores yo compraba traje de baños cada vez que iba a la playa y normalmente viajaba cada fin de semana”.
Flor Villalba afirmó que “yo salgo literalmente a comer vidrieras, con estos precios tan altos es imposible adquirir trajes de baños nuevos”.
Luisa Claro señaló que “salí a ver algunos precios para comprarle un bañador a mi hija pero no se va a poder, el más económico está en 15 dólares o al cambio del día y con lo que gano no alcanza”.
Amaloa Artal añadió que “no he visto gran variedad de trajes de baño en cuanto a modelos y colores”.
2020-01-31
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