La violencia escolar se puede presentar de muchas maneras dentro de un salón de clases, incluso, hay casos en donde el o la docente son las víctimas de acciones violentas por parte de los estudiantes.
Hay varias maneras de ser agredidos, entre ellas: física, verbal y psicológicamente.
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Sin embargo, ¿puede un profesor o profesora ser el blanco de violencia escolar por parte de sus alumnos? La respuesta es sí.
A pesar de la diferencia de edad y autoridad, un estudiante o un grupo de ellos puede arremeter contra su docente de muchas maneras.
¿Cómo se presenta una situación de violencia escolar entre estudiantes y docentes?
Así como hay casos en los cuales el profesor o profesora es el victimario en una situación de bullying, también puede ser la víctima de actos violentos.
Algunos ejemplos de violencia contra docentes son:
- Verbal
Una situación de agresión verbal se presenta cuando hay gritos e insultos por parte de un alumno en el salón de clases porque no quiere seguir las órdenes de su docente.
- Psicológica
Hay acciones voluntarias por parte de un estudiante en las cuales busca atacar de manera emocional a su profesor o profesora, con actitudes groseras, sabotaje, desobediencia, entre otras.
Este comportamiento no solo afecta al maestro, sino que impacta dentro del salón y la dinámica del grupo de estudio.
- Física
Los empujones, golpes y lanzar objetos hacia el o la docente se considera violencia y pueden ser reportados.
A través de varios docentes consultados se conoció que cuando se presenta un caso de este tipo, el educador debe acudir a la defensoría educativa correspondiente.
Cada circuito educativo cuenta con una defensoría escolar, la cual evaluará la situación y determinará si se requiere la intervención de otra jurisdicción, como la defensoría general.
¿Qué dicen las leyes?
Gloriana Faría, abogada del Servicio Jurídico de Cecodap, señala que así como la Ley Orgánica de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes establece que estos son sujetos de derecho, también deben cumplir con los deberes, entre ellos, seguir las disposiciones legales.
Una agresión, ya sea en cualquiera de sus tipos, se constituye como un delito, sin importar la edad del agresor y de la víctima.
La abogada indicó que un docente puede proceder contra las agresiones de un menor de edad, ya sean físicas o no, por considerarse violencia.
Helme Aliendo, juez, indicó a 2001 que si el alumno es menor de 14 años no tiene responsabilidad penal, por lo que debe la denuncia se hace ante un Consejo de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes.
Este se encargará de sustanciar el expediente y, si existen medios de pruebas suficientes, dictará una medida de protección.
Mientras que en los casos en los cuales el alumno es mayor de 14 años, la denuncia procederá ante una Fiscalía con competencia en el Sistema Penal de Responsabilidad del Adolescente.
Las autoridades encargadas inician la investigación penal y si existen suficientes elementos de convicción, solicitarán al Tribunal especializado con competencias en materia Penal Adolescentes, la imputación del agresor.
La sanción se aplica de acuerdo al delito cometido.
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