AP
Una mujer de Louisiana que fue arrestada por golpear a sus tres hijos a manera de castigo tras descubrir que entraron a robar a la casa de un vecino se encuentra bajo los reflectores del país y están siendo considerada como una madre modelo por funcionarios estatales de alto rango.
Schaquana Spears, de 30 años, fue arrestada el lunes en Baton Rouge por dos cargos de crueldad contra menores de edad, cargos que se consideran graves. Ella presuntamente empleó castigo corporal tan severo con sus hijos de 13 y 12 años que les dejó marcas. Las laceraciones en el brazo del niño de 13 años tenían sangre, se indica en el reporte de la jefatura de policía de East Baton Rouge.
En entrevistas con la prensa, incluyendo una de "CBS This Morning" transmitida a nivel nacional, Spears dijo que les impuso disciplina corporal a sus hijos para asegurarse que no lleven una vida delictiva. Dijo que el padre de los niños estaba en prisión y no quería que ellos también terminaran ahí.
"Jamás imaginé que intentar ser una madre me mandaría a prisión con un registro criminal, como si fuera una depredadora que quiere lastimar a mis hijos", dijo WBRZ-TV, una televisora de Baton Rouge. "No quería que cometieran otro crimen".
Golpeó a sus hijos el 17 de junio, luego de enterarse que habían robado una hoverboard y otros artículos de la casa de un vecino, dijo su abogado, Brenden Craig, en entrevista telefónica.
El reporte policiaco indica que los golpeó con un cable o un cinturón. También golpeó a su hijo de 10 años, pero no tanto como a los otros dos, según el reporte.
"Es una buena madre", dijo Craig. "Es una madre amorosa que quiere ver que sus hijos hagan lo correcto. Hizo lo que cualquier padre racional haría o debería hacer".
Desde su arresto, ha recibido muchas muestras de apoyo.
El miércoles el tesorero estatal de Louisiana, John Kennedy, un republicano que aspira al Senado federal, dijo en una carta al secretario del Departamento de Servicios Infantiles y Familiares de Louisiana, que Spears no debería ser arrestada por imponerle disciplina corporal a sus hijos.
"En tiempos bíblicos, tener una mano suave provocaba tener un niño malcriado", escribió. "En los tiempos actuales, hacer lo mismo provoca tener a un hijo en prisión".
El viernes, el fiscal general de Louisiana, Jeff Landry, respaldó esa postura y dijo en un comunicado que estaba agradecido de que su madre lo castigara para enseñarle qué estaba bien y qué estaba mal.
"Para ser una sociedad pacífica y moral, es imperativo que nuestros hijos distingan el bien del mal", dijo Landry. "Estoy agradecido de tener una madre amorosa que no dudaba en usar una vara para enseñarme esta valiosa lección".
El fiscal general dijo que revisará el caso porque el estado enfrenta una posible responsabilidad, en caso de que Spears entable una demanda civil.
Craig, el abogado de Spears, dijo que una demanda civil estaba garantizada.
Landry dijo que también determinará si se le retiró a Spears la custodia de los niños y si se justifica que el Departamento de Servicios Infantiles y Familiares lo haga.
Catherine Soileau Heitman, secretaria de prensa del Departamento de Servicios Infantiles y Familiares, dijo que un juez decretó el lunes que lo más conveniente para el niño de 13 años era que fuera puesto bajo custodia de servicios infantiles, y que el miércoles fue transferido a la custodia de un familiar.
En un comunicado, Marketa Walters, jefa del Departamento de Servicios Infantiles y Familiares, dijo que la disciplina "se convierte en abuso cuando un niño es quemado, sangra o queda con moretones". Agregó: "Nos referimos a algo más que unas nalgadas".
2016-06-24