El suceso ocurrió en el aeropuerto neoyorquino de La Guardia y la mujer entregó voluntariamente el calzado cuando le explicaron que a bordo de la aeronave no se podían llevar armas de fuego, ni siquiera de imitación.
Los trabajadores del puesto de control también informaron que incautaron un cinturón con balas falsas. Sin embargo, se desconoce si pertenecía a la misma mujer.
Según la Administración de Seguridad en el Transporte (TSA, por sus siglas en inglés), estas prendas son “réplicas realistas de armas de fuego” y no se pueden llevar a bordo.
Bajo las reglas de la TSA, que incluye ese material en su sección de “armas de fuego”, los zapatos y el cinturón deberían haber sido transportados en el equipaje facturado.
Una representante de la TSA tuiteó en el blog de esta agencia fotos del cinturón y de los zapatos de tacón, y advirtió que ese tipo de objetos podría ser incautado en los puestos de control aeroportuarios de todo el país.
ActualidadRT
Miercoles 24/7/2013