AFP
En las turbias aguas del río Támesis a su paso por Londres, algunos activistas aprovechan el paddle surf (surf de remo) para limpiar la plaga de desechos plásticos y llamar la atención sobre el problema.
Los patos y los cisnes completan un paisaje sereno cuando el sol se levanta sobre el Támesis, detrás del histórico puente de Kew, al oeste de la capital británica.
Pero si uno se fija con más detalle, observará todo tipo de objetos de plástico en la orilla, incluyendo bolsas de plástico colgando de los árboles.
Esta escena recurrente animó a varios miembros de la asociación de practicantes del paddle surf Active360 a implicarse en la limpieza del río y los canales de Londres.
Paul Hyman, Louise Nolan y James Roorda, miembros del grupo, salieron a navegar y limpiar esta semana. En media hora, habían acumulado lo suficientes como para llenar un cubo grande.
El acarreo incluía botellas de plástico, vasos, "y las más asquerosas bolsas de plástico: las que contienen caca de perro, que parecen llegar a todas partes ahora", dijo Nolan.
Muchos de estos productos tardarían cientos de años en degradarse.
2018-01-17