La semifinal de la Nations League en Múnich vio a Portugal asegurar su pase a la final tras vencer 2-1 a la anfitriona Alemania. Un partido tenso que culminó con la victoria portuguesa y un inesperado enfrentamiento entre la afición local y su principal figura, Cristiano Ronaldo.
A sus 40 años, el astro del Al-Nassr sigue desafiando las expectativas con su capacidad goleadora. Tras el empate de Francisco Conceiçao, fue Cristiano Ronaldo quien anotó el gol decisivo, sellando la remontada y el boleto de Portugal para la final del domingo.
Sin embargo, el protagonismo de CR7 no solo se limitó a lo futbolístico. Los aficionados alemanes, frustrados por el resultado, intentaron desestabilizar al '7' coreando el nombre de su eterno rival: "Messi, Messi". La rivalidad entre ambos astros se hizo sentir en el estadio.
Lejos de inmutarse, Cristiano Ronaldo respondió con humor y confianza. Frente a los ensordecedores cánticos, el portugués optó por un divertido baile, demostrando su aplomo y su capacidad para manejar la presión de la afición contraria.
Para "liquidar" cualquier duda, minutos después de su jocosa respuesta, CR7 marcó el gol de la victoria. Su celebración fue una declaración de intenciones: con la frente en alto, festejó frente a quienes intentaron provocarlo, confirmando su importancia en el campo.
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