El brasileño Marcelo reivindicó este miércoles el carácter "guerrero" del Fluminense y confesó que es un día "muy importante" en su carrera, tras pasar a la final de la Copa Libertadores de 2023 con una remontada in extremis ante Internacional por 1-2.
"Sabíamos que iba a ser muy difícil hoy y una vez más probamos que el Fluminense es un equipo de guerreros", afirmó el exjugador del Real Madrid en declaraciones a la cadena Globo sobre el césped del estadio Beira-Rio de Porto Alegre.
El lateral fue fundamental en la victoria del conjunto carioca al abandonar la zaga y situarse en el centro del campo como inductor del juego de los de Fernando Diniz.
Marcelo busca la Libertadores
"Nuestro objetivo desde el primer partido era llegar a la final. Hoy es un día muy importante no solo para mí, sino para mi familia y para los aficionados tricolores", reconoció.
"Llegamos desacreditos, pero los aficionados tricolores de verdad estaban con nosotros dentro del campo. Sentimos esa energía. No hubo un partido fácil en la Libertadores", completó.
Marcelo destacó que consiguieron darle la vuelta al marcador ante un rival "tan difícil" como el Inter con una mezcla de "equilibrio, paciencia e inteligencia".
"Todo es culpa de Diniz. Todo es culpa suya", señaló al manifestar su admiración por el también seleccionador brasileño.
Marcelo volvió este año al Fluminense, donde se formó, después de una larga y exitosa carrera en Europa, donde hizo historia con el Real Madrid y también defendió los colores del Olympiacos griego.
Fluminense jugará la final de la Copa Libertadores de 2023 el 4 de noviembre en el estadio Maracaná de Río de Janeiro ante el vencedor de la otra semifinal, que saldrá del duelo entre el también brasileño Palmeiras y el argentino Boca Juniors.
EFE
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