La próxima pelea de Mike Tyson contra Jake Paul aún está programada para el 15 de noviembre. pero persisten las preocupaciones sobre la salud del boxeados de 58 años. Informes sugieren que Tyson solo se someterá a una evaluación médica el día antes del combate.
Inicialmente programada para julio, la pelea tuvo que posponerse después de que Tyson sufriera un problema de salud en mayo, lo que generó dudas sobre si debería regresar al ring.
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Los aficionados han estado preocupados por la avanzada edad de Tyson y sus recientes problemas de salud. Muchos esperan que los reguladores de licencias de Texas vigilaran de cerca a la leyenda del boxeo durante la pelea.
Tyson se mantiene optimista. Él cree estar listo para enfrentar a Paul y ha asegurado a sus fans que su preparación va por buen camino.
El ex campeón de peso pesado se está preparando eliminando sustancias ilícitas y evitar tener relaciones sexuales para mejorar su desempeño en el ring de boxeo.
Algunos consideran que Tyson no está apto para pelear, el combate podría ser rebajado a una exhibición o incluso descartado por completo.
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