En el propio primer episodio este domingo de Grandes Ligas entre los Astros de Houston y los Marineros de Seattle, el venezolano José Altuve fue sorprendido con un envío descontrolado a 95 millas por hora que impactó contra su humanidad.
El hecho, que a simple vista resultó impresionante y con algo de conmoción entre los presentes; no pasó a mayores.
El diminuto camarero criollo se levantó rápidamente del home en el Minute Maid Park de Houston, dijo estar bien y corrió hacia la primera almohadilla; cojín que se ganó automáticamente tras ser golpeado.
El escopetero George Kirby, el lanzador que le propinó el pelotazo al Astroboy; no esgrimió jamás ninguna intención en su envío, por lo que se trató de un pitcheo que no pudo controlar y que golpeó la parte posterior de Altuve en su brazo izquierdo.
El infield quiso esquivar la pelota, pero le resultó imposible dada la velocidad y la tendencia de venir hacia él que llevaba la esférica.
Toda la afición se levantó de sus respectivos lugares en preocupación por José Altuve quien es ficha de Navegantes del Magallanes en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional (LVBP), pero la respuesta física del nacido en Carabobo dio a entender que todo se trató de un susto.
Los médicos de la organización también llegaron al instante hasta el plato para constatar que Altuve se encontraba en +optimas condiciones como de hecho ocurrió, y por lo que siguió en batalla para defender desde el terreno al equipo sideral cuando apenas el choque iniciaba.
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