¡¡¡Hello, hello!!!…Yyyy “avanti” con la semana, nuevamente me tienen frente a mi ultramoderna “compiuter”, en este raudo tecleo que no solo deja mis pobres uñitas todas escarapeladas, sino que también los pone “face to face” con lo más “hot, hot” (entiéndase: caliente que quema) del muy entretenido pero no menos desconcertante mundillo farandulero, que en los últimos días ha dejado el letargo de la cuarentena y ha estado bastante activa, dando de qué hablar y, por lo tanto, dándome materia prima para procesarles a ustedes, mis queridillos y queridillas lectores…
Pero como para luego es tarde, mejor paso a contarles que la MISS GRAND PANAMÁ está en Venezuela para echarse cuchillo en esa “carátula” porque ella no quiere quedar detrás de la ambulancia, sino que quiere figurar a como dé lugar… Buscando la perfección que logran los cirujanos criollos, la Angie Keith agarró sus peroles y se instaló en Caracas para mejorar la apariencia de la “respiradora” y se puso en manos del doctor Froilán Pérez, el mismo que le ha aplicado “latonería y pintura” a otras reinas de belleza venezolanas… ¡Síii, señores! La representante del país del itsmo en el certamen del “chinito tramoyero” fue por lo seguro y entró en quirófano venezolano, no sin antes rezarle a todos los santos, ofrecer promesas y deshojar la margarita por aquello de los problemas eléctricos que todos conocemos (no vaya a ser cosa que en medio de la incisión del bisturí ¡adiós luz que te apagaste! y quedara “papelón con limón”)… Peeero no es primera vez que la panameña se opera la nariz y tampoco es novedad hacerlo en Venezuela, pues hace cinco años también vino con el mismo fin, pero fue a parar a la isla de Margarita… El caso es que no estaban contentos con la apariencia de la susodicha y volvieron a confiar en el profesionalismo de tricolor y se pusieron en contacto con el “matasano” criollo, que la dejó “pepita” a menos de un mes para que le toque viajar… ¿Y la hinchazón propia de esa intervención quirúrgica? Bueno, tocará esperar a que los antiinflamatorios y el jugo de piña hagan su efecto. ¡Jum! A mí me late que la organización Señorita Panamá como que sabe que en éste, tu país, mi país se saben hacer las cosas, porque la Miss Panamá que va al templete del Miss Universo está preparándose en suelo patrio, además que también se operó con el Froilán (¿habrá salido en dos por uno?)…
Yyy pasando a otra cosa, mariposa, les bato que la producción de Portada’s ya no haya qué hacer con la GESARIA LAPRIETA y los cabellos que ahora carga y que se niega a cambiar. Desde el área de estilismo me llega el rumor de que le tiran puntas, le dicen directo que ya lo cambie, que hay formas de trabajar esos rizos para hacerlos ver mejor que amarrados todo el tiempo como una capocha, pero la animadora insiste en llevarlos. ¡Ojo! A esta Chepa que está aquí le encantan los cabellos llenos de vida y bonitos, pero no esos que parecen que les explotaron un traki-traki (¡Cues, recues cues!)… De acuerdo con la bola que me llega desde el canal de La Colina, ya no saben qué hacerle en esa cabeza a la Gesaria, porque ni con el paquete completo de ganchos negros logran parapetearla, mientras ella se niega a cambiar de look… ¡Susto!
Yyyy antes de despedirme por hoy, les cuento que quedé en un tacón y dando vueltas cuando vi que la DORA MAZZONE ofreció una entrevista el pasado fin de semana a Sábado en la Noche y por enésima vez sacó a relucir que Jean Carlo Simancas es su ex y el papá de su hija… ¡Mujer, pasa la página! Supéralo, chica. Lo peor del caso es que se atrevió a decir que, palabras más, palabras menos, al actor de marras lo conocen solo en su casa y a la hora del almuerzo. ¡Se pasó! No hay entrevista que dé la autodenominada “Reina del TikTok” en la que no saque a relucir el romance que tuvo con uno de los actores más respetados del país y del que le quedó una hija, demostrando que sufre del mismo síndrome que tiene la Lila Morillo al negarse dejar de hablar de El Puma a 1000 años del sonado divorcio. ¿Hasta cuándo? ¡¡¡Baaayyy!!!