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Eugenio Derbez develó el jueves su estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood, en una emotiva ceremonia en la que lo acompañaron su familia y cientos de admiradores hispanos que corearon "Eugenio, eres un genio" y cantaron "Cielito lindo".
El comediante, actor y director mexicano habló en español e inglés durante el acto de develación, que tuvo como orador especial al inmigrante que limpia su oficina. También se regalaron DVDs autografiados de su más popular filme, "No se aceptan devoluciones" ("Instructions Not Included").
"Mi camino a Hollywood ha sido difícil, pero ha tenido un final feliz", dijo en la ceremonia. "Mis hermanos latinos, gracias por ponerme donde estoy, esta estrella es gracias a ustedes. … Gracias por su amor, especialmente por apoyarme en esta nueva aventura en los Estados Unidos".
Tras develar su estrella, la besó y posó con la bandera mexicana, mientras mariachis cantaban al otro lado de la calle encima de un autobús acondicionado como escenario. Luego se acercó a gente que no dejaba de gritar su nombre, se tomó fotos con muchos de ellos y firmó autógrafos.
En una conferencia de prensa posterior, Derbez explicó que el invitado especial y los regalos eran para devolver a su público el cariño "genuino" y el apoyo que le han brindado a lo largo de su carrera.
"En México siento que … se acercan por la foto del que sale en la tele, una cara conocida. Aquí es diferente, aquí hay un cariño genuino. Siento que me ven como un pedacito de México, un pedacito de su infancia. Muchos se me acercan y me dicen, ‘Yo veía tus programas cuando estaba en México con mi abuelita o con mi tía o con mi mamá y, entonces, al verme, más que verme a mí, están viendo su infancia, están viendo un poquito de México, de su familia y ese cariño no tengo con qué pagarlo", relató.
La estrella se la dedicó a su familia: su esposa Alessandra Rosaldo y sus hijos Aislinn, Vadhir, José Eduardo Derbez y Aitana, todos presentes.
2016-03-10