Karen Ramírez | [email protected]
Empezar una nueva vida en República Dominicana no ha sido fácil para Leonardo Villalobos, pero sí satisfactorio.
Desde que se instaló en el país de la bachata, a mediados de 2016, este zuliano está al frente de Sábado Extraordinario, un maratónico que lo obliga a estar de traje y corbata el fin de semana; de lunes a viernes está “sentado detrás de un escritorio o metido en una sala de edición o metido en un estudio, coordinando una grabación”, contó. Sin embargo, ahora dividirá su tiempo en varios proyectos que le vienen en 2018.
“Voy a hacer dos obras escritas por mí, que están a tiro”, dijo. Estas piezas se le suman a una que realizó hace poco tiempo llamada La gemela de mi mujer, que tuvo más de 20 funciones, cuando la media en la isla es de 10 funciones máximo por obra, debido a la alta actividad teatral que hay en República Dominicana.
Televisión. “Telemicro, la cadena donde estoy -y digo cadena porque tiene tres canales de televisión- es la más fuerte, y es muy extraña esa sensación porque en Venezuela trabajaba por mi cuenta, pero ahora es distinto porque son 300 personas que tengo a mi cargo y ha sido un proceso de poder entrar como extranjero y decirle a la gente: ‘mira, yo vengo acá como extranjero a ser su amigo. Permítanme la oportunidad’, y me han abierto las puertas”, expresó Villalobos.
Es así como ahora se le da la oportunidad de estar al frente de un magazine, que verá luz el venidero año.
“El grupo compró el tercer canal y la idea es hacer un matutino porque acá no hay. Gracias a la experiencia en Portada’s, puedo hacerlo y estaré como productor y animador. Me ocupo de la parte técnica y el estudio está en construcción”.
Existe la posibilidad de tener un poco de su talento en Venezuela, pues ha estado en conversaciones para enviar material a nuestro país.
Miss Venezuela. “A Daniel Sarcos le costó años llegar al Miss Venezuela y a mí también. Ahora es como que ‘vengan, vengan’”, recordó el exanimador de Sábado Sensacional.
Solo después de seis años en Portada’s, Leonardo pudo conducir una gala de la belleza, porque en los años de Joaquín Riviera no se corría el riesgo de darle a un novato una responsabilidad tan grande, ni porque fuera un “relevo natural, tal como Daniel, a quien le pasó lo mismo, siendo un talento maravilloso que tuvo que ganárselo”.
Sin embargo, los tiempos cambian. “Ahora escogen a cualquiera y no quiero decir que los muchachos no tienen talento, pero les están haciendo un daño. A veces ves que la gente critica a estos animadores, pero no puede ser distinto porque tienen un año frente al micrófono. Se ha subestimado mucho este oficio, que cualquiera es tomado en cuenta por hablar bonito”, remató el animador zuliano.
2017-12-16