A nueve días después de su trágica partida, la figura de Rubby Pérez sigue generando conmoción y un profundo sentimiento de admiración en toda la República Dominicana.
Este miércoles, familiares, amigos cercanos, artistas y figuras del ámbito público se reunieron para celebrar el novenario por el eterno descanso del legendario merenguero, cuya vida fue truncada el pasado 8 de abril tras el colapso de la discoteca Jet Set, mientras ofrecía una de sus inolvidables presentaciones.
En una publicación compartida por De Último Minuto Media, se puede observar que durante la ceremonia, la familia Pérez compartió momentos íntimos de la vida que mostraron no solo al Rubby Pérez de los escenarios, sino al ser humano sensible, creyente y entregado a sus familiares.
Las palabras iniciales estuvieron a cargo de su hermano Eliezer Pérez, quien trató de resumir la esencia del artista que más que un recuerdo deja un legado que trasciende lo musical y habita en lo espiritual y afectivo.
La música, formó parte fundamental del homenaje. La reconocida cantante Maridalia Hernández interpretó con profunda emoción el himno cristiano “Cuán grande es él”, posteriormente, el también artista Ramón Orlando ofreció unas palabras de consuelo a los familiares, destacando el impacto cultural del intérprete.
El pastor Ezequiel Molina Rosario, figura influyente dentro de la comunidad evangélica del país, compartió una reflexión sobre la fragilidad de la vida y el poder transformador de la fe.
Aseguró que, aunque este trágico acontecimiento ha llenado de dolor a muchos, también representa una oportunidad para la unidad, el arrepentimiento y la reconexión con los valores espirituales. “Dios no es autor del mal, pero sí utiliza el dolor para hablar a su pueblo”, afirmó.
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