Pain Hustlers es una de las más recientes películas de Netflix, basada en una conspiración criminal verdadera.
La producción sigue los pasos de las exitosas y premiadas: Dopesick , ganadora del Peabody en 2021, y Painkiller de 2023.
Ambas dramatizaron el papel que desempeñaron la familia Sackler y Purdue Pharma en la proliferación generalizada de opioides altamente adictivos.
Los eventos produjeron a la postre muertes relacionadas con sobredosis en los Estados Unidos.
Netflix ahora estrena Pain Hustlers, una película que profundiza en una faceta menos conocida de la crisis.
Chris Evans y Emily Blunt son los protagonistas y encarnan a dos empleados de una compañía farmacéutica ficticia que toman atajos legales.
La firma promueve un enfoque de venta dura para ganar dinero con una droga peligrosamente adictiva.
Ambos se encuentran en una situación demasiado profunda cuando se ven envueltos en una red criminal.
Pain Hustlers se basa en un relato periodístico
El guión fue escrito por Wells Tower, pero la trama de la película se basa en gran medida en reportaje.
El nombre de esta pieza periodística es "The Pain Hustlers", cuya autoría es de Evan Hughes, publicado en The New York Times en 2018.
El artículo detalla las diversas técnicas que la compañía farmacéutica Insys Therapeutics utilizó para lanzar al mercado su analgésico altamente adictivo a base de fentanilo Subsys.
La empresa habría usado, además, un personal atractivo y carismático de representantes de ventas motivados y la contratación de médicos para recomendar el medicamento.
La herramienta de marketing y el programa de oradores eran en realidad una fachada para el soborno.
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