La Oficina Federal de Investigaciones (FBI) dijo este martes que indaga la presunta grabación, en febrero pasado, de una reunión privada del líder de la minoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, con miembros de su campaña de reelección.
"Solo puedo confirmar que fuimos contactados por la oficina del senador McConnell, y que estamos evaluando esas acusaciones", señaló a Efe Mary Trotman, una portavoz del FBI en Louisville (Kentucky).
En la grabación del pasado 2 de febrero, divulgada hoy por la revista Mother Jones, McConnell y sus asesores presuntamente evalúan estrategias para desacreditar a la actriz Ashley Judd, que se perfilaba como una posible rival de McConnell para el escaño de Kentucky en el Senado.
La semana pasada, Judd decidió no postularse al cargo y, por ahora, la campaña de reelección de McConnell no ha divulgado pruebas de que la grabación fue resultado de alguna escucha ilegal.
Sin embargo, una fuente allegada a la campaña de reelección de McConnell de cara a los comicios legislativos de 2014, dijo al diario Politico que están "suponiendo que se cometió un delito" porque "nadie en esa reunión filtró esto".
Según la revista Mother Jones, McConnell y sus asesores evaluaban la idea de atacar a Judd por "sus pasadas luchas contra la depresión y por sus opiniones religiosas".
Una voz no identificada dice en la grabación que Judd es "una desequilibrada emocional" y cómo la actriz ha padecido "algunas tendencias suicidas" e incluso "estuvo hospitalizada durante 42 días cuando tuvo un ataque de nervios en los años 90″.
La campaña de McConnell está convencida de que la grabación no fue una filtración y ha acusado "a la izquierda" de recurrir a "tácticas nixonianas" para acceder a información confidencial.
En declaraciones a los periodistas, McConnell dijo hoy que la presunta grabación ilegal demuestra "cómo la izquierda está operando en Kentucky".
"El mes pasado, ellos (líderes de la izquierda) atacaban el origen étnico de mi esposa y después, aparentemente y sin que yo lo supiese entonces, estaban haciendo escuchas en nuestra sede, toda una movida nixoniana. Esto es lo que sale de la izquierda en EE.UU. estos días", se quejó McConnell, sin contestar preguntas sobre la presunta estrategia contra Judd. /EFE