Al menos dos personas murieron y otras 40 resultaron heridas, políticas casi todos, en las protestas que sacuden Pakistán por segundo día consecutivo tras la detención de un líder islamsta que pide expulsión del embajador de Francia por la polémica de las caricaturas del profeta Mahoma; según fuentes oficiales.
"Un policía murió hoy en los choques con los manifestantes violentos y 40 policías han resultado heridos hasta ahora"; dijo a Efe Rana Arif, portavoz de la Policía en la ciudad de Lahore, donde se han producido los peores disturbios.
La fuente indicó que ha fallecido también un manifestante del partido islamista Tehreek-e-Labbaik Pakistan (TLP); organizador de las manifestaciones tras la detención, el lunes, de su líder Saad Rizvi.
Un portavoz del TLP, Ali Raza, indicó a Efe que que al menos seis manifestantes han muerto y 200 han resultado heridos a manos de la Policía; pero las autoridades no confirmaron ese extremo.
Protestas comienzan este lunes
Las protestas comenzaron el lunes por la noche con el bloqueo de carreteras y autopistas; una situación que continúa hoy con manifestaciones en numerosas ciudades y esporádicos enfrentamientos con la Policía.
Rizvi, líder del TLP, había dado un ultimátum al Gobierno para que expulsase al diplomático francés antes del 20 de abril; lo que provocó su arresto y las subsiguientes protestas.
El ministro de Ciencia y Tecnología, Fawad Chaudhry, afirmó esta tarde en una rueda de prensa que el Gobierno quiere resolver la situación de forma pacífica e indicó que ningún grupo debe dictar al Ejecutivo qué hacer.
"Ningún partido, ni grupo religioso debe pensar en dictar al Estado" cómo proceder, dijo Chaudhry.
El ministro afirmó además que los bloqueos de carreteras estaban dificultando el transporte de oxígeno para los enfermos de COVID-19.
El partido islamista afirma que el Ejecutivo aceptó en noviembre las demandas de expulsar al embajador francés del país y el corte de las relaciones bilaterales con Francia, pero no ha cumplido el acuerdo.
Los comentarios de Macron de "proseguir el combate por la libertad" tras la decapitación el pasado octubre de un profesor que mostró a sus alumnos las controvertidas caricaturas del profeta Mahoma en una clase de libertad de expresión, levantaron ampollas en partes del mundo musulmán.
EFE
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