El Juzgado de Instrucción de Zaragoza, en España, ordenó que la madre del bebé de ocho meses, hallado sin vida el pasado domingo en la capital aragonesa, sea encarcelada sin posibilidad de fianza.
La mujer, de 31 años, está acusada de ser la presunta autora de un delito de asesinato. La investigación policial concluyó que la madre mató al niño después de desaparecer con él. Según la autopsia, el pequeño falleció por asfixia.
Los agentes de la Jefatura Superior de Aragón detuvieron a la mujer el domingo, después de que el padre del bebé, de origen rumano, denunciara en la comisaría la desaparición tanto de su hijo como de su pareja y madre del bebé.
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La desaparición del menor activó el protocolo de actuación ante desapariciones inquietantes o de alto riesgo, conocido como ‘Alerta Ámber’.
El denunciante expresó una gran preocupación por la integridad de su hijo, lo que llevó a una rápida intervención policial.
Detuvieron a la mujer como presunta responsable de su hijo. La mismo no tenía antecedentes penales
Según fuentes de la Jefatura, una mujer llamó al 112 para alertar que había sido agredida por un hombre y una mujer del norte de África.
Además, manifestó que desde el día anterior no tenía noticias de su hijo .
Más detalle del suceso en España
Los investigadores confirmaron que la persona que realizó la llamada era la misma mujer que estaba denunciada por la desaparición junto a su hijo de ocho meses.
Poco después, una patrulla de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana se entrevistó con ella.
Debido a las incongruencias en su relato y a la ausencia del bebé, los agentes del Grupo de Homicidios colaboraron en la investigación.
Tras solo dos horas de búsqueda, encontraron el cuerpo sin vida del menor detrás de un banco, escondido entre unos matorrales en el parque cercano al edificio CaixaForum en Zaragoza (España).
Hace unos años, la madre y su familia llegaron a esta localidad.
La comunidad recuerda a la madre porque, poco después de su llegada, ocurrió el fallecimiento del primer bebé de Tatiana Diguele.
En aquel entonces, se atribuyó la muerte del bebé a una muerte súbita, enterraron al niño en un nicho de propiedad municipal.
Aunque la familia no es originaria de Borja, en las últimas horas, la ciudad ha expresado su apoyo a la familia y ha enviado mensajes cariñosos a Juan Carlos a través de las redes sociales.
El velatorio del pequeño se llevó a cabo ayer por la tarde en el tanatorio de Borja, permitiendo que los habitantes de Borja expresaran sus condolencias al padre y a los abuelos.
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