Casi siete años después de iniciada la obra, fue colocada la punta en el nuevo World Trade Center en Nueva York.
Grúas especiales alzaron las dos partes adornadas con banderas hasta los 400 metros de altura, casi 12 años después de que las torres que le antecedieron fueran derribadas en los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001.
La punta de 100 metros de altura aún no está montada. Cuando eso se haga en breve, el edificio, también llamado "Freedom Tower", será con sus 541 metros el más alto de Estados Unidos. Por el momento aún es unos metros más alta la Willis Tower en Chicago.
Los 1.776 pies de altura -un guiño al año en que se declaró la independencia de Estados Unidos- convierten al edificio en el sur de Manhattan también en el tercero más alto del mundo después del Burj Khalifa (830 metros, Dubai) y la Mecca Royal Clock Tower Hotel (601 metros, Arabia Saudí).
Los últimos retoques que le faltan al edificio se harán en la cumbre, una especie de aguja que supone más de un quinto de todo el rascacielos. Sus 105 plantas ya están construidas, aunque las más elevadas sólo son un armazón. Debajo brilla el azulado cristal de la torre.
Originalmente, el edificio iba a ser construido según un diseño del arquitecto estadounidense de origen polaco Daniel Libeskind. Dado que a los dueños el diseño les pareció demasiado utópico, el también estadounidense David Childs creó una torre más modesta, que se presume será inaugurada el año que viene.
Todo el proyecto tiene un costo que asciende a unos 4.000 millones de dólares. Junto al One World Trade Center se elevan también otros tres edificios de oficinas: el Two WTC (412 metros), el Three WTC (378) y el Four WTC (298). Se espera que la inauguración pueda realizarse el año que viene./DPA