EFE
El Senado brasileño comenzó a configurar hoy una clara mayoría favorable a la destitución de la presidenta Dilma Rousseff, durante una sesión en la que deberá pronunciarse sobre la continuidad de un proceso que puede concluir a fin de mes.
La sesión convocada para la primera de dos votaciones en las que se jugará la suerte de Rousseff debería durar unas 20 horas, pero el presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lewandowski, quien dirige el trámite como garante constitucional del proceso, ha dicho que está en negociaciones para intentar abreviar las discusiones.
Cuando concluya la fase de debates, los 81 senadores deberán votar un informe que recomienda la destitución de la mandataria, acusada de irregularidades fiscales que el instructor del proceso, Antonio Anastasia, ha calificado de "atentado a la Constitución".
Para que el informe sea aprobado es necesaria una mayoría simple de 41 votos y, tras las primeras ocho horas de debates, 24 senadores se habían declarado favorables, frente a apenas ocho que anticiparon su rechazo.
Uno de los legisladores que pidió la destitución de Rousseff fue Aécio Neves, quien preside el Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) y usó la tribuna en representación de otros diez senadores de esa formación, en un intento por acelerar la sesión.
2016-08-09