AP
La junta independiente que supervisa los programas de espionaje del gobierno estadounidense informó esta semana al presidente Barack Obama sobre las recomendaciones y las partes clave del reporte en el que está trabajando, dijo el viernes el director de ese grupo de trabajo.
La Casa Blanca informó el viernes que Obama anunciará los resultados de su revisión a los programas de espionaje de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) el 17 de enero. El mandatario desea bosquejar los cambios que hará a la práctica actual de la NSA de recabar todo registro telefónico de los estadounidenses y otras operaciones de espionaje.
David Medine, quien encabeza la Junta de Supervisión de la Privacidad y las Libertades Civiles, dijo a The Associated Press que los cinco integrantes hablaron de los detalles de su reporte con el presidente en un encuentro el miércoles en la Casa Blanca. Medine dijo que el grupo de trabajo acordó adelantar sus recomendaciones al mandatario para ayudarle a dar forma a sus decisiones sobre cambios a los programas de la NSA.
"Queríamos aportar en el proceso de toma de decisión", dijo.
Obama también se ha estado reuniendo con legisladores, autoridades de espionaje, empresas de tecnología y grupos de defensa de la privacidad. Además, está analizando más de 40 recomendaciones de una comisión presidencial que propuso amplias modificaciones a las facultades de la NSA.
El reporte completo de la junta supervisora será divulgado a la Casa Blanca, al Congreso y a la ciudadanía el 23 de enero. La junta, también conocida como PCLOB por sus siglas en inglés, es una agencia semindependiente nombrada por el presidente, pero que reporta al Congreso.
Se espera que Obama anuncie restricciones a los programas de espionaje de Estados Unidos a mandatarios extranjeros aliados. También está analizando seriamente un plan que quitaría a la NSA su capacidad para almacenar datos telefónicos de millones de estadounidenses.
En agosto, Obama pidió a la junta revisar el programa de espionaje telefónico de la Agencia de Seguridad y las operaciones de una corte federal secreta sobre espionaje. También nombró a un segundo grupo de trabajo, el Grupo de Revisión de Espionaje y Tecnologías de la Comunicación, para evaluar sus recomendaciones.
En diciembre, este grupo de revisión anunció 46 recomendaciones que incluían ya no permitir que la NSA almacene los datos telefónicos por sí misma y quedarían en manos de las empresas o de un tercer actor; y nombrar un defensor público como contraparte de los abogados del gobierno en sesiones secretas de la Corte de Vigilancia de Inteligencia Extranjera.