La iglesia Católica instó este domingo al gobierno del presidente Porfirio Lobo a detener la violencia en Honduras, donde unas 20 personas mueren cada día a causa de ese flagelo.
"¿La violencia es nuestra respuesta al mal?, dijo en su homilía el vicario de la Catedral Metropolitana de Tegucigalpa, Carlos Rubio. Y se contestó: "No olvidemos que la violencia engendra más violencia y no podemos reaccionar así cuando algo nos sale mal".
Rubio pidió al gobierno "ser más tolerantes a las críticas" porque "el principal propósito de cada cristiano es vencer al mal a fuerza del bien".
El sacerdote sostuvo también que "debemos decir no a la violencia, sí a la vida en paz, sí a la justicia, no a la esclavitud y sí a la libertad".
Rubio dijo que "la injusticia se vence con una verdadera aplicación de la justicia, la violencia con la paz y los valores, y las grandes desigualdades con la equidad".
Exhortó a los hondureños a "combatir la corrupción en las instituciones estatales con la honradez e integridad".
La violencia ha dejado más de 20.000 personas muertas en la gestión de cuatro años de Lobo, que concluye en enero próximo, según estadísticas estatales./AFP