Inter de Milán y Nápoles fueron los dos clubes que movieron el mercado invernal de fichajes italiano con incorporaciones por un valor total superior a 25 millones de euros, una cifra que rompió la tendencia de la mayoría de los equipos, que optaron principalmente por traspasos de "bajo coste".
La falta de liquidez de los clubes es especialmente sentida en Italia, donde los saldos y los intercambios entre equipos nacionales coparon los traspasos realizados en el último mes.
De hecho, más allá de fichajes palpables, fue el culebrón del posible intercambio entre Inter y Juventus del colombiano Freddy Guarín y el montenegrino Mirko Vucinic, abortado a última hora por el presidente del Inter, Erick Thohir, el que copó la actualidad deportiva italiana hasta el último momento.
Otra operación que a punto estuvo de devenir en fracaso fue el traspaso del brasileño Hernanes del Lazio al Inter, pero esta vez el presidente "neroazzurro" sí consiguió cerrar el acuerdo, tan solo unas horas antes de la clausura del mercado.
Los 15 millones que recibirá el Lazio por la venta de Hernanes convierten a la operación en la más destacada del mercado invernal, al menos en cuanto a términos económicos.
El club presidido por el magnate indonesio Thohir incorporó además al delantero peruano de 19 años Andy Polo, sin cifras confirmadas, y al defensa del Torino Danilo D’Ambrosio, por el que pagó 1.750.000 euros.
Al igual que el Inter, el Nápoles tiró de talonario para hacerse con los servicios del centrocampista brasileño Jorginho y del lateral argelino Faouzi Ghoulam, por 5 millones de euros cada uno.
El equipo napolitano, entrenado por el español Rafa Benítez, fichó también al defensa del Palmeiras brasileño Henrique, si bien las cifras de este traspaso no han transcendido por el momento.
El Sassuolo, debutante esta temporada en la Serie A (Primera División italiana), también aflojó el bolsillo y pagó 4,5 millones de euros por el fichaje del delantero paraguayo Antonio Sanabria, proveniente del filial del Barcelona.
El Juventus, líder de la competición, apenas se movió y tan solo cerró la incorporación del delantero argentino Daniel Pablo Osvaldo, cedido por el Southampton inglés hasta final de temporada y con una opción de compra de 19 millones de euros.
El Roma, inmediato perseguidor del Juventus en la lucha por el título de liga, terminó el mes de enero con un saldo positivo de 4 millones de euros tras la salida por 7,5 millones de euros del delantero estadounidense Michael Bradley al Toronto FC canadiense.
Al equipo "giallorrosso" llegaron el centrocampista brasileño Rafael Tolói, (del Sao Paolo), el belga Radja Nainggolan, (del Cagliari), el delantero sueco Valmir Berisha (del Halmstads BK) y el extremo brasileño Michel Bastos (del Al-Ain de Emiratos Árabes Unidos)
Por su parte, el Milan de Clarence Seedorf, que resultó por si mismo un fichaje revelación, se hizo con los servicios, a coste cero, de dos de los jugadores con más renombre llegados a Italia en el mercado invernal: el centrocampista ganhés Michael Essien y el delantero japonés Keisuke Honda.
Essien, que apenas ha contando en los planes del entrenador del Chelsea, José Mourinho, llega con un contrato hasta junio de 2015, mientras que Honda, proveniente del CSKA Moscú ruso, acordó su vinculación con el club lombardo hasta junio de 2018.
El Fiorentina incorporó también sin desembolso inicial a otro conocido jugador del fútbol inglés, el centrocampista brasileño Luis Anderson, cedido por el Manchester United con una opción de compra de cerca de 7 millones de euros al final de la temporada.
Con nombre propio, cabe destacar por último el enésimo cambio de equipo del delantero argentino Maxi López, que vuelve cedido al Sampdoria seis meses después de su participación en este equipo la temporada pasada, en préstamo por el Catania. EFE