El primer ministro de Japón, Fumio Kishida, anunció este lunes 9 de mayo que su país embargará las importaciones de crudo ruso mientras mantiene sus intereses en proyectos energéticos con Moscú para minimizar el impacto en su suministro energético.
Japón
"Para un país como Japón, que depende en gran medida de las importaciones de energía, es una decisión muy difícil, pero la coordinación del G7 es más importante en un momento como el actual", dijo Kishida en declaraciones a los periodistas desde el Kantei, la oficina y residencia oficial del primer ministro de Japón.
Por otro lado, el anuncio del mandatario nipón se produce horas después de participar en una reunión telemática con los líderes del denominado Grupo de los Siete (G7, integrado por Estados Unidos, Alemania, Canadá, Francia, Italia, Japón y Reino Unido). Además, reiteraron su compromiso para reducir la dependencia energética de Rusia.
Posteriormente, las potencias, que lograron llegar a un acuerdo para prohibir las importaciones de petróleo ruso, se comprometieron a emprender una transición "de manera oportuna" y "ordenada". Esto con el fin de que los países encuentren vías de suministro alternativas.
"Con base en la declaración de los líderes del G7, hemos decidido tomar medidas para embargar el petróleo ruso en principio", añadió el mandatario desde su cuenta de la red social Twitter.
Además, Kishida señaló que seguirá trabajando "estrechamente" con el G7 y los países implicados. Entre ellos Ucrania.
No obstante, el primer ministro no ofreció una hoja de ruta concreta sobre el embargo de crudo ruso. Durante el año 2021 representó en torno al 3,6 % del total de estas importaciones para Japón.
Acuerdos energéticos con Rusia
Pese al embargo, Kishida dijo que Japón mantendrá su participación en los proyectos energéticos que tiene actualmente con Rusia. Esto según detalles publicados por la cadena pública japonesa NHK
AP
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