Redacción 2001.com.ve
El origen de la tragedia actual en Grecia, no radica en la pretendida austeridad que defienden los partidos políticos Syriza o Podemos, sino en su desbocado e insostenible sector público que se notó fácilmente cuando estalló la crisis del euro.
Esa realidad es ocultada por los mencionados partidos de la izquierda europea, según el portal web LibreMercado hay 10 grandes vergüenza que dicho sector se ha negado en reconocer y que están cargado de "Engaños, despilfarros, irresponsabilidad política y un gran hipocresía social", estos son:
1. Mintieron sobre el déficit público
Los políticos griegos ocultaron su déficit público durante años, y cuando el nuevo gobierno de Atenas llegó al poder en el año 2009 se encontró un agujero fiscal que equivalía a 14% del PIB frente al 3,7% que se comunicó a Bruselas.
Es decir, que el déficit paso de "un día a otro" de 7.000 a casi 30.000 millones de euros y esto evidenció la irresponsabilidad de los distintos gobiernos griegos.
2. Atenas recurrió a la banca de inversión
Para ocultar las desastrosas cuentas públicas la admirada Grecia recurrió a los financieros de Wall Street y además se valió de los servicios de Goldman Sachs en 2002 con operaciones de inversión apuntadas a ser fraudulentas.
3. El estado causó la quiebra de la banca
La entidades financieras se cargaron de deuda pública durante los años de la burbuja para financiar el enorme y suntuoso gasto de los distintos gobiernos.
Una de las cosas que ocurrió es la aplicación de la quita del 50% a los bonos griegos en manos de acreedores privados en 2011, tras acordar el segundo plan de rescate con la troika.
Posterior a ello, Europa tuvo que inyectar dinero extra para salvar los depósitos de Grecia.
4. Vida a todo tren, pero con el dinero de otros
Grecia vivió muy por encima de sus posibilidades reales recurriendo a una ingente deuda pública, a base de una estructura clientelar a base de enchufes, corrupción y subvenciones:
- Durante años, y pese a tener un PIB per cápita muy inferior al de España, el salario mínimo en Grecia era un 50% superior.
- Durante décadas, cuando un partido llegaba al poder enchufaba a gente en el sector público a cambio de su voto, acrecentando de forma insostenible la plantilla estatal.
- El Hospital Evagelismos, uno de los principales de Atenas, por ejemplo, llegó a tener en nómina a 45 jardineros para cuidar de las cuatro macetas de su entrada; algunos organismos públicos contaban con 50 conductores por cada coche; un antiguo ministro de Agricultura creó una unidad no contabilizada que daba empleo a 270 personas para digitalizar las fotografías de las tierras públicas griegas, sin que ninguno de los contratados tuviera experiencia en fotografía digital, ya que eran carteros, peluqueros, agricultores y, en general, afiliados del partido…
- El gasto en educación, sanidad y política social fue, de lejos, el que más aumentó hasta el estallido de la crisis de deuda, superando el 31% del PIB en 2012.
- Además, Grecia, el gran referente de la izquierda radical, era el país de la UE que más dinero destinaba a gasto militar antes de la crisis, con una media superior al 4% del PIB.
5. Exceso de funcionarios e ineficiencia
Los gobiernos crearon numerosos cargos para gestionar sus políticas con un número desconocido de empleados que ganaban cifras muy superiores, incluso a la de los entes privados.
Además no sólo era una cifra estándar, contaban con varios beneficios como pensión vitalicia de 1.000 euros mensuales para las hijas solteras de empleados fallecidos.
Otro dato curioso es que su Sanidad pública era de las que más invertía en suministros, superando la media de la UE, sin que los griegos sufrieran más enfermedades que el resto de europeos. ¿Razón? Uno de los muchos escándalos destapados durante estos años es que era tradición entre médicos y enfermeras salir de los hospitales cargados con todo tipo de material higiénico y sanitario.
6. Empresa públicas, el culmen del despilfarro
El culmen del despilfarro era su sobredimensionada estructural estatal a base de cientos de empresas, organismos y entidades inútiles.
Uno de los casos notable es el del presupuesto del metro de Atenas rondaba los 500 millones de euros al año, mientras que los ingresos en taquilla apenas alcanzaban los 90 millones.
7. Jubilación de oro
Hasta el estallido de la crisis, los griegos se podían jubilar con poco más de 61 años, cobrando casi el 96% de su sueldo, siendo uno de los sistemas de pensiones públicas más generosos, además de contar con otras categorías laborales que podían optar de la jubilación anticipada establecida en 50 años para las mujeres y 55 para los hombres.
8. Sobornos y evasión fiscal
Antes de la crisis, uno de cada cuatro trabajadores no pagaba nada en impuestos, de modo que las arcas públicas dejaban de ingresar entre 15.000 y 20.000 millones de euros al año.
Muchos pagaban sobornos revelan estudios para evitar el pago de los impuesto y la cantidad de personas que pagaban debidamente no completaba la recaudación que correspondía.
9. Deuda pública desbocada
Grecia fue el país que más recurrió a la deuda pública durante la época de burbuja y, por ello, su factura anual en el pago de intereses superó, hasta el segundo rescate a Grecia, el 12% de los ingresos públicos.
10. Pueden pagar, pero no quieren
Syriza y Podemos reclaman ahora una nueva quita soberana, pese a que el Estado heleno se endeudó voluntariamente para cometer todos los excesos descritos anteriormente, en lugar de que Grecia asuma su responsabilidad y pague lo que debe.
Según el Banco Central Europeo (BCE), Atenas posee una enorme cartera de activos públicos, cuyo valor estimado asciende a 300.000 millones de euros, además puede vender islas, playas, oro y monumentos si es necesario para cumplir sus compromisos.
Aunado a ello también podría solucionar con la reducción y corte de algunos de los beneficios que otorgaron ilícitamente, puede también hacer un plan ambicioso de reformas para liberar economía y bajar impuestos, pero todo apunta que no lo hará.
2015-07-02