El Líbano se quedó sin internet el domingo debido a la escasez de combustible, informó la empresa estatal. Lo que agrava las penurias de la población en medio de la devastadora crisis económica que afecta al país.
Imad Kreidieh, director de la compañía nacional de internet Ogero, tuiteó que a partir del domingo una importante planta eléctrica al oeste de Beirut, al-Mazraa, se quedaría sin gasolina y tendrá que dejar de funcionar.
La interrupción afecta a unos 26.000 suscriptores, incluyendo las salas de operación de la Seguridad Interna, manifestó Kreidieh a la televisora Al-Jadeed TV.
Para mediodía del domingo, un residente donó gasolina lo que permitió a la estación a reanudar funcionamiento, agregó. Entretanto, otro vecindario en el este de Beirut, Achrafieh, se quedó sin diesel y tuvo que funcionar con baterías.
“La situación es intolerable”, declaró Kreidieh a la emisora.
LUZ RACIONADA
Los libaneses tienen apenas unas horas de electricidad cada día y dependen de una red de generadores privados que también dependen del combustible diesel. Esto a veces deja vecindario enteros en la oscuridad.
Entretanto los habitantes comunes tienen que pagar numerosas facturas. Incluso para los operadores de las plantas generadoras, que van aumentando a medida que empeora la crisis.
Los servicios de telecomunicaciones internet en el Líbano incluso antes eran muy costosos. En el 2019, las autoridades impusieron un impuesto al uso de WhatsApp, lo que desató masivas protestas.
En el Líbano, que depende de las importaciones, también escasean las medicinas. Con lo que la ciudadanía depende del mercado negro y de medicinas traídas del exterior.
Líbano sufre la peor crisis económica y financiera de su historia, en la que la clase del media del país ha caído en la pobreza.
AP
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