El arquitecto británico Norman Foster ha abandonado el proyecto de reconstrucción de la llamada "Manzana de los Museos" de Moscú, que incluye el complejo museístico de Pushkin, escribió hoy la publicación cultural rusa The Art Newspaper.
La publicación achaca el abandono a las exigencias del arquitecto jefe del Ayuntamiento de Moscú, Sergueí Kuznetsov, que instó al británico a que se implicara más en el proyecto y viajara durante un mes a la capital rusa para participar en el mismo.
La empresa de Foster explicó en una carta enviada a The Art Newspaper, parcialmente publicada hoy por esta editorial, que salió del proyecto hace ya más de dos meses.
"Foster + Partners (el estudio del famoso arquitecto) ha rechazado oficialmente el proyecto y ha puesto la condición de que sus nombres no pueden ser usados en este proyecto, lo que confirmó Norman Foster en una carta enviada al director del museo (Púshkin) el 5 de junio de 2013″, cita la publicación rusa.
El estudio de arquitectura explica que tomó la decisión porque el museo, "en los últimos tres años", no le ha "implicado en el desarrollo del proyecto en el que están trabajando otros, a pesar de los numerosos intentos" de sumarse al mismo.
El pasado miércoles, en el consejo de arquitectos del proyecto de reconstrucción, el arquitecto jefe de Moscú, aparentemente ajeno a la carta que habría enviado el británico al Púshkin, pidió a Foster que tomara una decisión sobre su participación en la reconstrucción de la "Manzana de los Museos".
"El propio Foster debe defender su proyecto, participar activamente en éste, algo que lamentablemente no se da en la actualidad", dijo Kuznetsov.
Agregó que, si el destacado arquitecto toma la decisión de retirarse definitivamente, "seguramente se convocará un nuevo concurso en el que se elegirá a otro equipo, puede que de arquitectos occidentales" para entrar en el proyecto.
Foster y el estudio de arquitectos Mosproyekt-5, liderado por Serguéi Tkachenko, ganaron en 2009 el concurso para la reconstrucción de un complejo de museos situado en el corazón de la capital rusa.
El proyecto de ambos estudios contemplaba la reconstrucción de los edificios existentes y la construcción de otros nuevos para integrarlos en un complejo museístico cuyas partes estarían unidas mediante pasos subterráneos. EFE