Redacción 2001.com.ve/EFE
Instituciones, organizaciones y ciudadanos recordaron este viernes la muerte de Eric Garner, el hombre negro víctima hace un año de uno de los casos más sonados de brutalidad policial y una de las mechas que reactivaron las últimas tensiones raciales en Estados Unidos.
El lema "I can’t breath" ("no puedo respirar"), la frase que el fallecido repitió hasta 11 veces mientras el agente Daniel Pantaleo le practicaba una llave ilegal de estrangulamiento, volvió a sonar en Nueva York y sobre todo, en Staten Island, donde Garner perdió la vida.
Otras frases como "Un año sin justicia" o "Las vidas de los negros importan" se pudieron ver en el lugar exacto del suceso, en la calle Bay, donde acudieron su hija de quince meses, Legacy Garner, su padrastro, Ben Carr, y la madre de su hija, Jewel Miller.
La pequeña Legacy hizo el gesto más emotivo de la mañana al liberar una paloma blanca de una jaula de madera.
En lo institucional, la presidenta del Concejo del Ayuntamiento de Nueva York, Melissa Mark-Viverito, aseguró en un comunicado que "Eric Garner era un neoyorquino que compartía las mismas esperanzas y sueños que todos los neoyorquinos y su muerte fue una tragedia innecesaria".
Se recuerda que Los policías se acercaron a Garner, de 43 años, para detenerlo por venta ilegal de cigarrillos y el incidente terminó con su muerte, que quedó registrada en un vídeo.
A pesar de ello, un gran jurado de Staten Island concluyó que no había razones para la imputación del agente que le inmovilizó.
El de Garner se sumó a otros fallecimientos de afroamericanos como Trayvon Martin o Michael Brown a manos de agentes, casos que quedaron sin cargos contra sus autores.
Además, mañana, el reverendo y activista de los derechos civiles Al Sharpton liderará una manifestación frente a la corte de Brooklyn para presionar para que se siga investigando la muerte de Garner.
2015-07-17