El panorama de tensión entre Israel e Irán aumentó con la reciente intervención de Estados Unidos en suelo iraní, llevando el conflicto a un punto crítico.
El secretario estadounidense de Defensa, Pete Hegseth, aseguró este domingo que Estados Unidos no busca ir a la guerra, pero si sus intereses se ven amenazados, actuará con "rapidez y decisión", reportó EFE.
Con ello, el gobierno de Trump deja en claro que no planea iniciar un conflicto bélico a gran escala contra Irán. Sin embargo, de obtener una represalia, su accionar militar será contundente.
¿Qué se dijo sobre los bombardeos?
Estados Unidos atacó durante la noche del sábado las tres principales instalaciones nucleares de Irán: Isfahán, Natanz y Fordó, dejándolas completamente destruidas.
De acuerdo con Pete Hegseth, el objetivo de la operación no era ocasionar un cambio de gobierno en la República Islámica de Irán, sino asegurar que no utilizarán sus armas nucleares.
"La operación no tuvo como objetivo a las tropas iraníes ni al pueblo iraní. Trump ha declarado desde hace más de 10 años que Irán no debe obtener un arma nuclear, punto final. Gracias a su liderazgo audaz y visionario y a su compromiso con la paz a través de la fuerza, las ambiciones nucleares de Irán han sido destruidas".
El mismo presidente Donald Trump advirtió al gobierno iraní que los ataques continuarán si no cooperan con el llamado a la paz.
"El ataque llevó meses de posicionamiento y preparación para poder estar listos", dijo Hegseth, solo esperando que Trump diera la orden.
En este contexto, Dan Caine, jefe del Estado Mayor Conjunto, informó que los sistemas de misiles iraníes no lograron detectar a las fuerzas estadounidenses durante el ataque. En total fueron empleadas 75 armas guiadas de precisión, alcanzando todos los objetivos buscados.
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